Políticas
Europa
El Reino Unido solicita el liderazgo de Witty, Vallance y Van Tam: ¿puertas giratorias? (The UK turns to Witty, Vallance, and Van Tam for leadership: revolving doors?)
Tom Jefferson
British Medical Journal Blogs, 6 de diciembre de 2017
http://blogs.bmj.com/bmj/2017/12/06/tom-jefferson-the-uk-turns-to-witty-vallance-and-van-tam-for-leadership-revolving-doors/
Traducido por Salud y Fármacos
Las puertas giratorias se utilizan para facilitar la entrada o salida a un edificio. El truco para usarlas es que el tiempo que se tarda en salir o entrar sea siempre el tiempo correcto. Si van demasiado rápidas o demasiado lentas uno se queda atrapado.
La analogía parece apropiada para referirnos a una serie de noticias recientes sobre importantes personajes de la industria farmacéutica que se hacen cargo de partes claves de la planificación y la entrega de servicios de salud de Reino Unido.
Andrew Witty, quien dejó el cargo de director ejecutivo de GSK en abril, encabezará el programa de Acceso Acelerado a la Revisión (Accelerated Access Review AAR) del gobierno de Reino Unido. Se dice que el AAR tiene como objetivo ayudar a los pacientes del NHS a “acceder más rápidamente a innovadoras herramientas de diagnóstico, tratamientos y tecnologías médicas”.
Mientras tanto, Patrick Vallance deja su cargo de jefe de investigación y desarrollo de GSK como parte de una reorganización de la nueva CEO, Emma Walmsley. Vallance ha tomado un puesto de responsabilidad en el gobierno de Reino Unido, será asesor científico principal. Su trabajo “como jefe de la Oficina del Gobierno para la Ciencia será mejorar la calidad y el uso de la evidencia científica en el gobierno”.
Por último, otro académico con amplios lazos con la industria en relación a la planificación para responder a la gripe y a las pandemias (y otro ex empleado de GSK, Roche y Aventis Pasteur MSD), Jonathan Van Tam ha sido nombrado subdirector médico responsable de la preparación para emergencias y la planificación para las pandemias. Este es un puesto de alto nivel, de mucho poder y potencialmente implicará la asignación de grandes cantidades de dinero de los contribuyentes a proyectos para preparar y responder a futuras emergencias, que pueden o no producirse. También es un papel muy delicado, como muestra la cantidad de lobbying y la presión corporativa sobre los gobiernos antes de la pandemia de influenza de 2009.
¿Quiénes somos para hacer todo esto?
Hay una reducción de la regulación y de los estándares de las evaluaciones de la tecnología (Health Technology Assessment) y esto se debe a la presión de la industria farmacéutica. La retórica general de apresurar la aprobación de los medicamentos y dispositivos a través de pacientes necesitados dispuestos a aceptar riesgos sustanciales se basa en pruebas muy débiles de beneficios, y el apoyo del público no está muy claro.
Es imprescindible mejorar la calidad de la evidencia, tal como lo demuestran los descubrimientos de la última década sobre los muchos ensayos clínicos que se han abandonado o distorsionado. La planificación para las pandemias también requiere un replanteamiento, como se ha demostrado con los millones de libras gastadas en una pandemia dudosa con soluciones igualmente dudosas. El corto espacio de tiempo en estas “puertas giratorias” me lleva a preguntar si el gobierno ha supervisado de manera objetiva y adecuada la toma de decisiones que ha resultado en el nombramiento de personas que han ocupado altos cargos en la industria farmacéutica para cargos públicos tan importantes. ¿Puede uno separarse de una industria tan importante, o codearse con ella, y realizar una importante función de salud pública con imparcialidad? El gobierno parece pensar que sí, pero si Ud. no está seguro (como yo) Ud. puede tomarse algo de tiempo para pensarlo.
Una carrera dedicada al trabajo en la industria farmacéutica generalmente significa un paquete proporcional de participación en la empresa y un paquete de despedida. Se nos dice que Andrew Witty también está involucrado en una empresa de capital de riesgo, por lo que su vida comercial todavía es muy activa. No nos han dicho si han vendido sus acciones o si las han depositado en un fideicomiso oculto o, en general, cómo se comportarán al asesorar al gobierno de Reino Unido en decisiones sobre medicamentos, productos biológicos o pruebas diagnósticas que ellos ayudaron a desarrollar y comercializar.
El historial del profesor Van Tam como ex empleado de Roche, Aventis Pasteur MSD y SmithKline Beecham (ahora GSK) ha sido excluido del comunicado oficial del Departamento de Salud, lo cual es interesante, pero difícilmente genera confianza. Asiste con frecuencia a eventos organizados por el Grupo de Trabajo Científico Europeo sobre la Influenza (ESWI), un conocido grupo de cabildeo financiado por la industria. Su predecesor en el puesto, John Watson, fue miembro fundador de ESWI. Van Tam ha apoyado consistentemente las medidas farmacológicas para combatir la influenza y como jefe de la Oficina de Influenza Pandémica de la Agencia de Protección de la Salud del Reino Unido en 2004-2007 es responsable de decisiones que han sido muy criticadas por el Comité de Cuentas Públicas. Van Tam estuvo en la facultad de ciencias de la salud de la Universidad de Nottingham, cuyo canciller no es otro que Witty.
En mi opinión, es hora de que el gobierno y el público observen detenidamente lo que está ocurriendo en los escalones superiores de la planificación y la prestación de servicios de salud en este país y consideren imponer una moratoria sustancial de tiempo para contratar trabajadores con vínculos estrechos con la industria. Los nombramientos de altos mandos ¿no deberían estar sujetos al escrutinio del comité parlamentario?
No es un consuelo, pero las puertas parecen estar girando a tiempo completo también en EE UU, el último es el nombramiento del ex jefe de Eli Lilly para dirigir el Departamento de Salud y Servicios Sociales.
El inminente traslado de EMA de Londres a Ámsterdam puede haber sido un factor en los nombramientos en el Reino Unido y podría haber más actividad de puertas giratorias si hay una avalancha de reguladores que no desean trasladarse, o el Gobierno podría intentar asegurar a la industria que todavía toma decisiones. Otra razón para monitorear los eventos de cerca. Con tanto movimiento, la puerta giratoria eventualmente se atascará y dejará de funcionar de la manera en que fue diseñada. Lo que los tomadores de decisiones parecen haber olvidado es que el éxito de la salud pública depende de que el público tenga plena confianza en sus líderes.
Tom Jefferson, Senior Associate Tutor, University of Oxford.