Los gobiernos de América Latina abordan la problemática de la Hepatitis C de manera tímida, restrictiva y privilegiando los compromisos comerciales sobre los Derechos Humanos
Así lo expresan 18 organizaciones de la sociedad civil latinoamericana que se reunieron el pasado 31 de octubre en Sao Paulo (Brasil), pocas horas antes de iniciar la Segunda Cumbre Mundial de Hepatitis – 2017, en esa ciudad
El propósito del encuentro: dialogar sobre las vías de acción más apropiadas que permitan presionar a los gobiernos de la región para que implementen políticas que respondan a las necesidades de la ciudadanía, en relación con el acceso a medicamentos y tratamientos para la Hepatitis C (VHC).
Al finalizar este foro, las organizaciones sociales participantes suscribieron una declaración en la que precisan sus requerimientos y propuestas de solución.
Un escenario complejo
Durante la apertura del foro comunitario, Francisco Rossi Buenaventura –Director de la fundación IFARMA y de la campaña Regálate Un Minuto- señaló que el escenario de la Hepatitis C es mucho más complejo que el del VIH.
Precisó que gran parte de las organizaciones sociales que hoy hacen gestión social en VHC vienen del trabajo en VIH y que no se incorporaron las lecciones aprendidas en VIH.
“Aprendimos que tenemos solidaridad de los pacientes de los países del norte porque allá tampoco es posible pagar el costo de los medicamentos”, dijo.
Al cierre de su intervención, expresó que se requiere el diagnóstico y tratamiento para todas las personas, pero no a cualquier precio.
Gilead: renuncia a las patentes
El encuentro permitió que los representantes de las organizaciones sociales participaran en una acción de protesta pública, frente a las oficinas de Gilead Sciences, en Sao Paulo, con el propósito de evidenciar los altos precios que la empresa farmacéutica ha fijado para los medicamentos, bajo la protección de una patente.
Allí, los activistas latinoamericanos expresaron la necesidad de bajar los costos de los medicamentos.
Los puntos de la declaración
El pronunciamiento de las organizaciones sociales latinoamericanas se divulgó a través de plataformas sociales y en los medios digitales de cada una de éstas. También se compartieron algunas copias impresas con las personas que asistieron a la Segunda Cumbre Mundial de Hepatitis.
La declaración precisa que:
- Aunque los medicamentos antivirales de acción directa entraron al mercado hace tres años, el acceso es limitado a los pacientes más graves. Esto es resultado de los altos costos del tratamiento.
- En los últimos años se ha registrado un retroceso significativo en la implementación de las salvaguardas de salud contempladas en el Acuerdo ADPIC, en relación con los medicamentos, consecuencia de las presiones políticas y comerciales que afecta las condiciones de vida de las comunidades, a la vez que debilita la capacidad de respuesta de los sistemas de salud.
- Los gobiernos no han hecho el esfuerzo suficiente para la compra de tratamientos y han descuidado la promoción, la prevención de la infección, así como la vigilancia epidemiológica. Esto tiene efectos directos en la meta que la Organización Mundial de la Salud proyecta para 2030: eliminar la hepatitis.
Para enfrentar el escenario que describen, las organizaciones sociales proponen:
- Sustituir el modelo actual de patentes y otras formas de protección por otro que permita la transferencia de tecnología a los países en desarrollo y evite la apropiación privada del conocimiento producido con recursos públicos, entre otros.
- Fortalecer los mecanismos que promuevan la implementación de las salvaguardas de salud contempladas en el Acuerdo ADPIC, vincularlos con la producción local y facilitar precios asequibles.
- Incluir productos genéricos, como una alternativa a las compras centralizadas, y así fortalecer el acceso a los medicamentos.
- Rechazar los tratados comerciales que pongan en riesgo el derecho a la salud y el acceso a medicamentos.
- Brindar apoyo a la aprobación de un tratado vinculante para castigar las violaciones de los derechos humanos por parte de las empresas multinacionales, incluido el derecho humano a la salud.
- A Gilead Sciences que abandone sus solicitudes de patentes sobre los medicamentos para VHC y respete la soberanía de los países, pues estudios realizados muestran que no se trata de productos nuevos que tengan altura inventiva.
Nosotros representantes de las organizaciones de la sociedad civil de Latinoamérica reunidos antes de la Reunión Cumbre sobre Hepatitis Virales en São Paulo el día 31 de octubre de 2017
Observando que:
- Los gobiernos y la OMS han tenido una respuesta tímida que privilegia los derechos de propiedad intelectual y los derechos comerciales de las empresas farmacéuticas sobre el derecho a la salud de las personas.
- Los abusos de la industria farmacéutica han alcanzado niveles nunca antes vistos en la definición de precios de medicamentos patentados, que conllevan la violación del derecho humano a la salud y limitan la posibilidad de que los sistemas de salud garanticen el acceso universal a medicamentos.
- En los últimos años se han evidenciado retrocesos importantes en la implementación de las salvaguardas de salud contempladas en el Acuerdo ADPIC en relación con los medicamentos, como resultado de presiones políticas y comerciales, en el marco de un deterioro de las condiciones de vida y de salud de las personas y el debilitamiento de la capacidad de respuesta de los sistemas de salud.
- En el caso específico de la hepatitis C, los gobiernos no han hecho los esfuerzos suficientes para la compra de tratamientos, y han descuidado los sistemas de vigilancia epidemiológica, la promoción del diagnóstico y la prevención de la infección, lo que compromete el alcance de la meta de la eliminación de la hepatitis C en 2030.
- Después de 3 años de la entrada al mercado de los Antivirales de acción directa (DAAS), como resultado de los altos costos del tratamiento, el acceso sigue siendo limitado a los pacientes más graves. Defendemos el derecho de los ciudadanos a recibir tratamiento, pero este derecho debe incluir a todos los ciudadanos y solo es posible con sistemas de salud fuertes, lo que no es posible bajo la extorsión a que estamos sometidos por causa de las patentes.
Frente a lo antes expuesto, las organizaciones firmantes:
Proponemos sustituir el actual modelo de innovación para medicamentos que incluye patentes y otras formas de protección como la exclusividad de datos de prueba, por un modelo que (a) busque soluciones a los problemas de salud pública relevantes; (b) permita una real transferencia de tecnología a los países en desarrollo; (c) que no permita la apropiación privada de conocimiento producido con recursos públicos; (d) que no lleve a que los intereses comerciales violen sistemáticamente el derecho a la salud de las personas.
- Exigimos que los gobiernos fortalezcan los mecanismos para garantizar la implementación de las salvaguardas de salud contempladas en el acuerdo ADPIC, articulados con estrategias de producción local que sean transparentes, que garanticen la soberanía sanitaria y precios asequibles en los países.
- Aunque reconocemos que las negociaciones de compras centralizadas son un avance en el acceso a medicamentos, observamos que su alcance es limitado, y que es necesario que se incluyan productos genéricos y se permita una efectiva participación de la sociedad civil.
- Rechazamos los tratados comerciales que pongan en riesgo el derecho a la salud y el acceso de medicamentos, en particular el TPP 11 y el tratado Mercosur-Unión Europea. Al mismo tiempo apoyamos la aprobación del Tratado vinculante para castigar las violaciones de los derechos humanos por parte de empresas multinacionales, incluyendo violaciones al derecho humano a la salud.
- Solicitamos a la OPS que soporte a los países para que fortalezcan las bases de datos de indicadores básicos sobre la hepatitis C, que soporte la implementación de la vigilancia y la cascada de seguimiento, y que involucre a la sociedad civil en la discusión de las metodologías para el desarrollo de estudios de prevalencia (especialmente después de las revisiones/ajustes mayores de las estimaciones).
Demandamos a Gilead que abandone sus solicitudes de patentes sobre los medicamentos para el tratamiento de la Hepatitis C y respete la soberanía de los países, ya que estudios realizados han mostrado que no se trata de productos nuevos y que tengan altura inventiva.
Las organizaciones firmantes:
Fundación Grupo Efecto Positivo –Argentina
Acción Internacional para la Salud –Perú
Asociación Comunidad Hepatitis C –Uruguay
Fundación Ifarma –Colombia
Red Latino Americana por el Acceso a Medicamentos RedLAM
Grupo de Incentivo à Vida –Brasil
Bem-me-quer –Brasil
Movimento Brasileiro de luta contra as hepatites virais –Brasil
Forum de ONGs Aids do Estado de Sao Paulo-Brasil
Sonoh nosso- Frente de apoio comunitario -Brasil
Rio Chagas –Brasil
Grupo pela vida –Brasil
NHR –Brasil
Coalition Plus –Francia
Asociaçâo Brasileira Interdisciplinar de AIDS ABIA
Universidades Aliadas por medicamentos essenciais -Brasil
Fórum Social Brasileiro de Enfrentamento de Doenças Infeccionas e Negligenciadas –Brasil
Grupo de Trabalho em propriedade intelectual GTPI –Brasil