La OMS ha publicado la recomendación condicional de que no se utilice remdesivir en pacientes hospitalizados, independientemente de la gravedad de la enfermedad, ya que actualmente no hay pruebas de que remdesivir mejore la supervivencia y otros desenlaces en esos pacientes (Nota de Salud y Fármacos: como la necesidad de ventilación mecánica o la mejoría clínica).
La recomendación, publicada el 20 de noviembre, forma parte de unas directrices evolutivas sobre el manejo clínico de la COVID-19. Su elaboración ha corrido a cargo de un grupo internacional de elaboración de directrices integrado por 28 expertos en atención clínica, cuatro pacientes-asociados y un especialista en ética.
Asimismo, las directrices se elaboraron en colaboración con la entidad sin fines de lucro Magic Evidence Ecosystem Foundation (MAGIC), que prestó apoyo metodológico. Las directrices son una innovación que combina las normas científicas con la celeridad necesaria para responder a una pandemia en curso.
La labor al respecto se inició el 15 de octubre, cuando el Ensayo Solidaridad de la OMS publicó sus resultados provisionales. Entre los datos examinados por el cuadro de expertos se incluían los resultados de este ensayo y de otros tres ensayos controlados aleatorizados. En total, en los cuatro ensayos se tuvieron en cuenta los datos de más de 7000 pacientes.
Las pruebas apuntaban a que no había ningún efecto importante en la mortalidad, la necesidad de ventilación mecánica, el tiempo de mejora clínica y otros resultados importantes para el paciente.
El grupo de elaboración de directrices reconoció la necesidad de realizar más investigaciones, especialmente para hacer acopio de pruebas de mayor certeza en grupos específicos de pacientes. Los integrantes del grupo se mostraron partidarios de seguir registrando pacientes en los ensayos en que se evalúa el remdesivir.
Nota de Salud y Fármacos: Un comentario en el BMJ añadió que esta recomendación se basaba en los resultados ensayos clínicos aleatorizados que involucraron a más de 7.000 pacientes con Covid 19 [1]. El panel reconoció que la calidad de la evidencia era baja, y no permite afirmar que el remdesivir no aporta ningún beneficio, pero con la información disponible hay evidencia de que contribuya a mejorar los resultados para los pacientes. El panel decidió que, dados los efectos secundarios, que pueden ser graves, su elevado costo y los recursos que conlleva la administración endovenosa de remdesivir, era oportuno manifestarse en contra de su utilización. El panel también decidió que eran conveniente seguir inscribiendo a pacientes en ensayos clínicos con remdesivir, para mejorar la certeza de los resultados en grupos específicos de paciente.