Una organización internacional sin ánimo de lucro para fomentar el acceso y el uso adecuado de medicamentos entre la población hispano-parlante
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Alrededor de 80% de personas infectadas con SARS-Cov-2 experimentarán una versión asintomática o un cuadro leve de la enfermedad: anosmia, fiebre, dolor muscular, tos, diarrea, dolores inespecíficos y cefalea, sin alteración de los signos vitales.
En pacientes con Covid-19 leve, la ivermectina, el dióxido de cloro, los corticoides, el ácido acetil salicílico, el rivaroxabán, el dabigatrán, la estreptoquinasa, los antibióticos, los antitusígenos, la hidroxicloroquina, la colchicina o las estatinas, no han demostrado ningún beneficio.
La información al paciente, la nutrición e hidratación adecuadas son fundamentales. En caso de ser necesario, el paracetamol sigue siendo la opción más segura y eficaz para el control sintomático (adultos: 500mg cada 6 horas, dosis máxima: 4g/día). No se recomienda usar oxígeno suplementario en pacientes con COVID-19 leve, el uso rutinario de oxígeno aumenta los riesgos, el costo de la atención y promueve desabastecimientos.
Lo más importante es priorizar el seguimiento ambulatorio, o a través de telemedicina, de aquellos pacientes con comorbilidades asociadas, especialmente en enfermedades cuya fisiopatología involucra lesión del endotelio vascular, factores de riesgo protrombóticos o inmunosupresión crónica, por ejemplo: diabetes, hipertensión arterial, dislipidemias, obesidad, sobrepeso, hipotiroidismo, poliglobulia, infección por el virus del VIH, toma crónica de corticoides, entre los principales.
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