AbbVie enfrentó numerosas críticas y cuestionamientos por su decisión de abandonar su propuesta de compra de Shire por US$55.000 millones en 2014. Tras años de idas y vueltas, la empresa ha logrado eludir una demanda de los fondos especulativos (hedge funds) que alegaban que la empresa los engañó acerca de sus verdaderas intenciones.
En julio de 2014, cuando AbbVie dio a conocer su propuesta de acuerdo con Shire, aludió no solo a los beneficios fiscales de adquirir una farmacéutica irlandesa sino también “a su elevado valor estratégico”. Sin embargo, poco después, en septiembre de ese mismo año, cuando el Departamento del Tesoro de EE UU implementó nuevas regulaciones contra las controvertidas inversiones fiscales, la empresa renunció a la fusión.
Esa secuencia de eventos implicó grandes pérdidas para los fondos especulativos, que luego demandaron a AbbVie alegando fraude. En sus demandas, los fondos especulativos afirmaron que compraron acciones de Shire con la esperanza de que se cerrara el trato, y sufrieron grandes pérdidas cuando AbbVie abandonó la idea en octubre de 2014 [1]. Agregaron que las declaraciones públicas de AbbVie no coincidían con sus intenciones privadas sobre la adquisición de Shire.
Este lunes, Margaret A. Brennan, jueza del condado de Cook, falló a favor de AbbVie, otorgando un juicio sumario y desestimando los reclamos de los fondos especulativos. Los demandantes estaban “tirando dados y esperando ganar dinero” al adquirir las acciones de Shire después del anuncio de compra, dijo la jueza. Ellos “debieron haber hecho su propio análisis” y “tenían que ser conscientes de que había posibilidades de que la operación no se concretara”, agregó.
En representación de AbbVie, Gabor Balassa, del bufete de abogados Kirkland Ellis, dijo que las declaraciones de la compañía sobre las negociaciones de fusión, tanto antes como después del anuncio del 14 de julio de 2014, utilizaban un lenguaje cauteloso y opiniones sobre el acuerdo propuesto, no declaraciones de hechos.
Al parecer, los fondos especulativos interpretaron las cosas de manera diferente. En representación de los demandantes, Robert B. Tannenbaum de Bartlit Beck dijo que AbbVie dijo “repetidamente” a sus clientes que el trato “no estaba impulsado por los beneficios fiscales”, sino que era “estratégica y financieramente convincente, mucho más allá de los beneficios fiscales”. Tannenbaum dijo al tribunal que eso no coincidía con lo que la empresa decía entre bambalinas como lo demuestra la decisión de la compañía de retirarse del acuerdo después de que el Departamento del Tesoro de EE UU implementara su normativa para este tipo de inversiones.
“AbbVie siguió con la estrategia de emitir mensajes falsos para minimizar el escrutinio gubernamental sobre el acuerdo, evitar que la compañía fuera considerada evasora de impuestos y conservar el apoyo esencial de los accionistas de Shire”, dijo Tannenbaum.
En 2016, el fondo especulativo Elliott Management demandó a AbbVie por la fusión fallida, y otros fondos especulativos entablaron sus propias demandas durante los años siguientes. El litigio ha durado años, y los abogados han tomado casi 100 declaraciones.
En otro caso separado, AbbVie llegó a un acuerdo con los accionistas de Shire en 2019 por un monto no revelado [3].
Después de que AbbVie y Shire dieran por concluidas las negociaciones, Takeda terminó comprando a la farmacéutica irlandesa en 2018 por US$62.000 millones. AbbVie, por su parte, logró otra megafusión en mayo del año pasado con la compra de Allergan por US$63.000 millones.
Nota de Salud y Fármacos: Un fondo especulativo es un tipo de inversión que combina posiciones cortas y largas, con el fin de realizar una cobertura de la cartera de inversión frente a los movimientos del mercado. Puede generar muchas ganancias, pero también implica grandes riesgos.
Referencias