Reuters informa [1] que a principios de mayo el estado de Washington llegó a un acuerdo por US$518 millones con los distribuidores de medicamentos McKesson Corp (pagará US$197 millones), AmerisourceBergen Corp (US$160,5 milllones) y Cardinal Health Inc (US$160,5 millones), tras meses de litigio sobre el presunto papel de las empresas en fomentar la epidemia de opioides en el estado.
Washington, al igual que West Virginia, optó por no participar en el acuerdo nacional de opioides por US$26.000 millones con los tres distribuidores de medicamentos más grandes de EE UU y Johnson & Johnson; si hubiera participado en el acuerdo habría recibido US$417,9 millones de los tres distribuidores [1]. El acuerdo será definitivo cuando todas las subdivisiones políticas del estado acepten participar antes de la fecha límite de septiembre de 2022. Está previsto que los pagos se distribuyan a lo largo de 17 años [1].
Sin embargo, a principios de julio, un juez federal determinó que esos mismos distribuidores no fueron responsables de alimentar la epidemia de opioides en la ciudad de Huntington y el condado de Cabell de Virginia Occidental (West Virginia) [2]. Los fiscales habían pedido US$2.500 millones. Según el juez, las empresas no causaron ningún exceso de oferta de opioides, y que fueron las decisiones de prescripción de “buena fe” de los médicos las que impulsaron el volumen de analgésicos que los mayoristas distribuyeron a las farmacias (que entre 2006 y 2014 alcanzaron los 51,3 millones de pastillas) [2].
El condado de Cabell y la ciudad de Huntington se vieron muy afectados por la epidemia. Los opioides representaron más del 80% de las muertes por sobredosis en el condado de Cabell entre 2001 y 2018; y según documentos judiciales, en 2017, más del 10% de los residentes en Huntington y en los condados de Cabell y Wayne eran adictos a los opioides o lo habían sido en el pasado. En todo el estado de Virginia Occidental hubo más de 6.000 muertes por sobredosis entre 2001 y 2015. En su denuncia, los fiscales acusaron a los distribuidores de vender suficientes opioides en Virginia Occidental entre 2006 y 2014 para que ” cada hombre, mujer y niño del estado recibiera 611 pastillas contra el dolor” [3].
Como hemos visto, hay inconsistencias en el resultado de los juicios. El año pasado, los tribunales en Oklahoma y California rechazaron demandas similares contra fabricantes de medicamentos como Johnson & Johnson [2]. Por otra parte, en noviembre de 2021, un jurado federal declaró responsables a las cadenas de farmacias CVS Health Corp, Walgreens Boots Alliance Inc y Walmart Inc en un caso presentado por dos condados de Ohio. En diciembre 2021, un jurado de Nueva York declaró responsable a Teva Pharmaceutical Industries Ltd en un caso presentado por el estado y dos condados [2].
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