Las gliptinas, o inhibidores de la dipeptidil peptidasa 4 (DPP-4), son una familia de fármacos que se utilizan para tratar la diabetes tipo 2 [1]. Este subconjunto de medicamentos denominados fármacos basados en incretina, se toman por vía oral e incluyen a la alogliptina (Nesina), la linagliptina (Tradjenta), la saxagliptina (Onglyza) y la sitagliptina (Januvia). El Grupo de Investigación en Salud de Public Citizen ha clasificado a todos los fármacos de esta familia como medicamentos “No usar”, ya que sus limitados beneficios para reducir los niveles de azúcar en la sangre no compensan sus notables riesgos, los cuales incluyen dolor articular intenso, pancreatitis aguda, insuficiencia cardíaca y reacciones cutáneas graves [2].
Un nuevo estudio publicado en junio de 2022 en la revista médica British Medical Journal (BMJ) [3] demostró que, en comparación con otros fármacos para la diabetes, las gliptinas ponen a los pacientes en un mayor riesgo relativo de padecer una serie de enfermedades biliares o de la vesícula biliar, como cálculos biliares (colelitiasis) e inflamación de la vesícula biliar (colecistitis, afección que suele requerir la extirpación quirúrgica de la vesícula biliar). Aunque el riesgo absoluto de estos efectos adversos fue relativamente bajo, con unos 11 casos adicionales por 10.000 años-persona, estos se suman a los numerosos riesgos ya conocidos de estos medicamentos.
Las familias de medicamentos incluidas en el estudio
Cuando los pacientes con diabetes de tipo 2 no pueden mantener el nivel adecuado de azúcar en la sangre solo con dieta y ejercicio, los médicos les pueden recetar uno o más medicamentos para la diabetes.
Existen varios tipos de medicamentos que actúan de distintas formas para reducir los niveles de azúcar en la sangre.
El nuevo estudio comparó a las gliptinas con varias otras familias de fármacos para la diabetes en dos metaanálisis distintos (estudios que analizan datos agrupados de otros múltiples estudios) [4]. Un metaanálisis incluyó 82 ensayos clínicos que compararon a las gliptinas con fármacos no basados en incretina, o con placebo. En otro metaanálisis, los investigadores incluyeron 184 estudios que compararon a las gliptinas con otras dos clases de medicamentos para la diabetes (agonistas del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1 y flozinas), o con la atención estándar, con otros tipos de fármacos para la diabetes o con placebo.
Agonistas del péptido similar al glucagón tipo 1
Los agonistas del péptido similar al glucagón tipo 1 (también denominados miméticos de incretinas) están basados en la incretina, (al igual que las gliptinas), aunque casi todos los fármacos de esta clase son inyectables. Los miméticos de la incretina incluyen a la dulaglutida (Trulicity), la exenatida (Bydureon Bcise, Byetta), la liraglutida (Saxenda, Victoza), la lixisenatida (Adlyxin) y la semaglutida (Ozempic, Rybelsus, Wegovy). Los medicamentos de esta familia también han sido designados como “No usar” por el Grupo de Investigación en Salud de Public Citizen, ya que los beneficios limitados de estos fármacos no compensan los efectos adversos graves —incluyendo riesgos cardiovasculares, la pancreatitis y el cáncer de páncreas y tiroides [5]—.
Flozinas
A diferencia de las gliptinas y los miméticos de la incretina, las “flozinas” o inhibidores del cotransportador sodio-glucosa tipo 2 (SGLT2) son fármacos para la diabetes no basados en la incretina. Las flozinas se toman por vía oral e incluyen la canagliflozina (Invokana), la dapagliflozina (Farxiga), la empagliflozina (Jardiance) y la ertugliflozina (Steglatro).
Los resultados del nuevo estudio [6]
El conjunto de estudios que compararon a las gliptinas, flozinas y miméticos de la incretina, entre sí, con el placebo o con otros fármacos antidiabéticos, reveló que los pacientes con diabetes tipo 2 presentaban un mayor riesgo de desarrollar enfermedades biliares o de la vesícula biliar cuando tomaban uno de los dos fármacos basados en incretina, gliptinas o miméticos de la incretina, en comparación con los pacientes que tomaban flozinas, otros medicamentos para la diabetes o placebo.
Por ejemplo, en comparación con los pacientes que tomaban flozinas, los que tomaban gliptinas tenían un riesgo relativo un 55% mayor de desarrollar inflamación de la vesícula biliar, y los que tomaban miméticos de la incretina tenían un riesgo relativo un 46% mayor. Los pacientes que tomaban gliptinas o miméticos de la incretina tenían un 31% y un 46% más de probabilidades de desarrollar cálculos biliares, respectivamente, que los que tomaban flozinas.
En el otro conjunto de ensayos clínicos que compararon a las gliptinas con los fármacos no basados en la incretina, o con placebo, las gliptinas también aumentaron el riesgo relativo de inflamación de la vesícula biliar, en comparación con los otros tratamientos. Por ejemplo, los pacientes que tomaban gliptinas tenían un 43% más de riesgo relativo de desarrollar inflamación de la vesícula biliar que los del grupo de control, riesgo que aumentaba al 51% cuando los pacientes tomaban gliptinas durante 26 semanas o más. Sin embargo, el estudio también reveló que las gliptinas solo aumentaban mínimamente el riesgo relativo de cálculos biliares de los pacientes y no provocaban un mayor riesgo de enfermedades biliares, en comparación con los fármacos no basados en la incretina o el placebo.
Los principales riesgos asociados al tratamiento a largo plazo son especialmente preocupantes, ya que los pacientes suelen tomar este tipo de fármacos durante un período más largo que cuando participan en los ensayos clínicos. Esto podría significar que el riesgo de enfermedades biliares y de la vesícula biliar de los pacientes es aún mayor que el que se indica en este estudio.
Qué hacer
No utilice ninguna de las gliptinas o miméticos de la incretina comentados en este artículo, ya que no hay evidencia contundente de que estas ofrezcan mayores beneficios a los pacientes que otros medicamentos para la diabetes, sino que más bien se asocian a efectos adversos significativos. Si está tomando alguno de los medicamentos descritos anteriormente, consulte a su médico para cambiar a otro medicamento para la diabetes que sea más seguro. No suspenda ningún medicamento antes de consultar a su médico.
Si está tomando gliptinas o miméticos de la incretina y experimenta síntomas relacionados con la inflamación de la vesícula biliar —incluyendo dolor intenso en la parte superior derecha del abdomen (que a menudo surge tras una comida de alto contenido graso), junto con náuseas, vómitos y fiebre—, pregunte a su médico si podrían estar relacionados con el medicamento.
Notifique todos los efectos adversos graves relacionados con las gliptinas u otros medicamentos al programa de notificación de efectos adversos MedWatch de la FDA visitando http://www.fda.gov/MedWatch o llamando al 800-FDA-1088.
Referencias