En abril de 2023, la Comisión Europea adoptó propuestas para actualizar la legislación farmacéutica europea, que consisten en una nueva directiva y un nuevo reglamento para reemplazar varias directivas y reglamentos vigentes que son aplicables a este sector [1,2].
En septiembre de 2023, Prescrire presentó una lista de modificaciones para mejorar las propuestas de la Comisión en varias áreas de gran importancia para lograr un cuidado de salud de gran calidad. Estas incluyen:
Prescrire también propuso que se elimine de la directiva el derecho de los estados miembro a restringir o prohibir el acceso a anticonceptivos o medicamentos abortivos.
En la primera fase del proceso legislativo europeo, la Comisión de Medioambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria (ENVI) del Parlamento Europeo votará las propuestas de la Comisión Europea, con las modificaciones de los miembros del Parlamento Europeo (MEPs) y, en particular, las de sus ponentes. Los ponentes publicaron sus propuestas de enmiendas a principios de octubre de 2023.
La ponente de la directiva propuesta (que pertenece al Partido Popular Europeo) planteó principalmente modificaciones que favorecen a la industria farmacéutica, después de haberse reunido con muchos representantes de las empresas (y muy pocos representantes de la sociedad civil). Sus propuestas pretenden fortalecer la protección de los datos clínicos (y, como resultado, prolongar el período durante el cual las empresas disfrutan del monopolio para sus medicamentos); relajar los requisitos sobre la evaluación del impacto de los medicamentos en el medioambiente; permitir que las farmacéuticas decidan no comercializar sus medicamentos en países que no revisten un interés económico para ellos; y permitir a los estados miembro que decidan si utilizarán prospectos electrónicos o impresos [4].
El ponente del reglamento propuesto (un miembro de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas) propuso modificaciones similares a las solicitadas por la sociedad civil, y se reunió con varios representantes de este sector. Presentó enmiendas similares a las que propusieron Prescrire y otras organizaciones de la sociedad civil, en particular: mantener el requisito de que se renueven los permisos de comercialización cada cinco años; rechazar la implantación general de un método de evaluación para las situaciones de emergencia que se ensayó durante la pandemia de covid-19; y rechazar la institucionalización de una exención de muy alto nivel de la legislación, denominada “caja de arena”, que permitiría a la EMA eludir por completo el proceso legislativo europeo [5].
Sin embargo, no se incluyeron algunos puntos importantes, sobre todo la necesidad de ejecutar ensayos clínicos comparativos con el tratamiento de referencia, si existe, para obtener el permiso de comercialización.
En la próxima etapa, los miembros del Parlamento votarán las propuestas de la Comisión Europea con las modificaciones del comité ENVI. Prescrire monitoreará cada etapa del proceso.
Referencias