Resumen
Jenei y Wirtz han publicado un editorial relacionado con la importancia de determinar el avance en el acceso a medicamentos esenciales. A continuación, se presenta un breve resumen de dicho escrito [1]:
El artículo destaca los desafíos en la medición del acceso a medicamentos esenciales utilizando el indicador de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 3.b.3 (ODS 3.b.3), adoptado por las Naciones Unidas e indica que “se ha abierto una ventana de oportunidad con la revisión del Grupo Interinstitucional de Expertos sobre indicadores ODS de 2025, que se debe aprovechar para evitar que este indicador desaparezca“.
Según el escrito, el indicador ODS 3.b.3 mide la proporción de establecimientos de salud que cuentan con un inventario de medicamentos esenciales sostenible, pero en la base de datos de la OMS sólo están disponibles 24 encuestas nacionales desactualizadas, lo cual amenaza la continuidad del indicador en futuros informes de la ONU.
Las razones principales de esta falta de datos son: (1) sobrecarga de los países debido al aumento del número de objetivos e indicadores ODS; (2) mayor complejidad del indicador ODS en comparación con su predecesor en los Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM); y (3) es la única medida de acceso a los medicamentos, incluyendo los medicamentos que producen o adquieren los gobiernos locales. Tradicionalmente, ha habido mayor acceso a la información sobre los medicamentos que proveen las agencias de ayuda internacional.
Esto dificulta la medición precisa de la cobertura universal de salud y la comprensión de la carga financiera que representan los medicamentos para las personas.
Las autoras sugieren varias soluciones, incluyendo: revisar la lista de medicamentos esenciales, eliminar el “peso de la carga de la enfermedad” del cálculo, aprovechar la infraestructura de datos existente a nivel nacional, como los datos de farmacias minoristas, y promover la transparencia internacional de los mercados de medicamentos.
Además, instan a renovar el compromiso para asegurar que este indicador crucial permanezca en la agenda mundial de salud, destacando la revisión del Grupo Interinstitucional de Expertos sobre indicadores ODS de 2025 como una oportunidad crítica para la mejora.