Acceso e Innovación
Los contribuyentes estadounidenses están financiando la vacuna del Zika. Asegurémonos de que tienen acceso
(US taxpayers are funding a Zika vaccine. Let’s make sure US patients can afford it)
Ed Silverman
Statnews, 29 de mayo de 2017
https://www.statnews.com/2017/05/29/zika-vaccine-price/
Traducido por Salud y Fármacos
Estimado Secretario Interino Speer,
Como usted sabe, EE UU debe prepararse para futuros brotes del virus Zika, pero se ha detonado un debate de alto nivel sobre el acuerdo que el gobierno federal podría establecer con la compañía privada que desarrollará una vacuna. Como secretario interino del Ejército de los EE UU, usted tiene la oportunidad – y la responsabilidad – de encontrar una solución viable.
La cuestión es si se debería obligar a la empresa -en este caso, Sanofi Pasteur- a que, a cambio de una licencia exclusiva para desarrollar la vacuna en un producto comercial venda la vacuna, que se basa en tecnología descubierta con fondos de contribuyentes estadounidenses, a un precio asequible para los mismos.
Entiendo que hay riesgos, pero usted debe encontrar una manera de asegurar que los estadounidenses no paguen demasiado.
Aquí está la historia: El año pasado, el gobierno entregó a Sanofi, que es uno de los mayores fabricantes de vacunas del mundo, una subvención de US$43 millones. Si la investigación avanza podrían sumarse otros US$130 millones. El Ejército también reveló planes para otorgar a Sanofi una licencia exclusiva para un par de patentes que son cruciales para la vacuna.
Pero esto ha molestado a algunos legisladores y defensores de los pacientes, que temen que el acuerdo dé a la compañía un monopolio que puede explotar – y, suponiendo que el virus se extienda y las vacunas se conviertan en un gran mercado, podría llevar a Sanofi a elevar los precios para los consumidores estadounidenses.
Como telón de fondo de esta preocupación está la controversia, aun mayor, sobre el aumento del costo de los medicamentos de venta con receta, un problema que ha molestado a muchos estadounidenses, y que provocó una ráfaga de legislación y puso a la industria farmacéutica a la defensiva.
Sanofi, que ya está siendo criticada por el precio de la insulina, es bien consciente del problema. A principios de este mes, la compañía trató de desviar las críticas -y el incremento de publicidad negativa- prometiendo limitar el alza de los precios de sus medicamentos a un nivel igual o inferior a la tasa de inflación médica en EE UU.
Sin embargo, un grupo de defensa del consumidor, Knowledge Ecology International, sostuvo que no se puede confiar en Sanofi y señaló el precio de su medicamento para la esclerosis múltiple: Aubagio. Los estadounidenses que usan un cupón pueden pagar alrededor de US$6,100 por el suministro de un mes – siete veces más de lo que pagan los pacientes en Francia y al menos cuatro veces el precio en el Reino Unido, Irlanda y Australia. Una portavoz de Sanofi dice que los precios varían debido a las circunstancias de cada país.
Esta es la razón por la cual el senador Bernie Sanders y otros sostienen que el Ejército debe presionar a Sanofi para obtener un precio justo para la vacuna del Zika. Quieren una garantía de que los estadounidenses pagarían un precio comparable al que cobren en otros países. Pero como usted sabe, secretario Speer, el mes pasado Sanofi rechazó la solicitud de su personal.
Los fabricantes de medicamentos generalmente evitan discutir las decisiones de precios por adelantado y Sanofi no es una excepción. En este caso, la compañía ha notado que la vacuna ni siquiera existe.
Un ejecutivo de Sanofi ofreció la semana pasada más información en una carta a un subcomité de la Cámara de Representantes. “Dado el alto riesgo del desarrollo de la vacuna y la imprevisibilidad de enfermedades como el Zika, si el gobierno de EE UU cambiara su enfoque histórico sobre los términos de las licencias, podría socavar el interés en este tipo de colaboraciones”, escribió Adam Gluck, jefe de relaciones gubernamentales de Sanofi.
En otras palabras, si una empresa se ve obligada a aceptar ciertas restricciones de precios por adelantado, puede que no se moleste en trabajar con el gobierno para desarrollar dichas vacunas en primer lugar.