La historiadora y profesora de Harvard Anne Harrington cree que las compañías farmacéuticas han desempeñado un papel muy importante en determinar cómo se tratan las enfermedades mentales en EE UU, lo que ha provocado un aumento en el uso de antidepresivos.

El nuevo libro de Harrington, Mind Fixers: Psychiatry Troubled Search for the Biology of Mental Illness, describe la historia de los psicofármacos, como Prozac y Xanax, que se han utilizado para tratar la depresión y la ansiedad, así como el litio, el primer medicamento para tratar lo que ahora se llama trastorno bipolar.

Antes de la década de 1970, dice Harrington, la sociedad tendía a distinguir entre las formas de depresión que deberían tratarse con medicamentos y la depresión causada por “tragedias que suceden en la vida”, que se pensaba que respondían mejor a la terapia de conversación.

Pero a medida que las compañías farmacéuticas comenzaron a comercializar antidepresivos, el enfoque del tratamiento para muchas personas se alejó de la terapia de conversación. Harrington dice que este cambio no siempre ha sido útil para los pacientes.

“No sabemos lo suficiente sobre la biología de estos trastornos mentales para determinar si algunos tienen origen biológico o no, que es como la medicina prefiere pensar en estos problemas, como enfermedades, o si se deben a que una persona se enfrenta a situaciones terribles”, dice Harrington. “Me encantaría ver muchas más opciones, desde puntos de vista más pluralistas.

Puntos destacados de la entrevista
¿Por qué el grupo de pacientes tratados con medicamentos contra la ansiedad creció tanto a finales de los 70?

Había habido un enorme mercado para los medicamentos contra la ansiedad… En 1978, creo que se vendieron cerca de 2.200 millones de píldoras de Valium. Fue el medicamento de venta con receta más vendido en la década de 1970. Y era un medicamento contra la ansiedad, pero luego resultó que era adictivo y la gente no podía dejarlo. El mercado de las benzodiazepinas cayó en picado. Pero, ¿dónde están estas personas? ¿Qué vamos a hacer con este tipo de pacientes?

Bien, hace tiempo que se sabía que a menudo uno de los síntomas de la depresión era la ansiedad. Y así se podía pensar: “Bueno, tal vez estos pacientes a los que previamente se les había diagnosticado ansiedad, de hecho, sufren depresión que se manifiesta como ansiedad aguda, y tal vez los antidepresivos ayuden”. Y lo hicieron. Y así el pool de personas que sufren de “depresión” se fue ampliando. lLos casos de depresión, tal como la entendemos ahora, se han incrementado tanto que para la psiquiatría es como un resfriado común.

También sucede algo que terminó con la distinción que la psiquiatría había hecho entre las formas de depresión que deben tratarse médicamente y las formas de depresión que se consideran neuróticas o reactivas, que se producen por cosas desagradables que pasan en la vida, y que muchos pensaban que se debían tratar con terapia de conversación. Pero si resulta que la medicación ayuda a todos, entonces algunos piensan que tal vez esta distinción no es tan importante; quizás lo más importante es la severidad de los síntomas. Y en algún momento, los síntomas son lo suficientemente graves como para que Ud. escoja prescribir un medicamento para el paciente.

Sobre por qué Prozac se impuso en psiquiatría
La ironía del éxito de Prozac fue que su fabricante, Eli Lilly, no esperaba mucho de él. Prozac sale al mercado, y como se promueve como más seguro [que los antidepresivos disponibles anteriormente], los médicos empiezan a prescribirlo. Los médicos generales y los psiquiatras recetan Prozac más que otras marcas, y también comienzan a recetarlo a pacientes a los que previamente hubieran dudado en prescribirle un antidepresivo tricíclico que se hubiera considerado más peligroso.

¿Por qué el mercado de antidepresivos está ahora en un punto muerto?
Los enormes avances en la historia de la depresión y con los antidepresivos se producen a finales de los años 90, cuando varios estudios empezaron a sugerir, cada vez con más fuerza, que si bien estos antidepresivos ayudan a muchas personas, en comparación con placebo, no parecen hacerlo mucho mejor. Y eso no es porque no estén ayudando a las personas, sino porque los placebos también ayudan. El simple hecho de pensar que estás tomando Prozac, supongo, puede tener un efecto poderoso en tu estado de depresión. Sin embargo, para que un medicamento llegue al mercado, tiene que ser mejor que el placebo. Si no lo logra, el medicamento fracasa.

Sobre el litio, el primer fármaco para tratar el trastorno bipolar
Lo primero que se debe saber sobre el litio para entender su extraño lugar en la historia de la psiquiatría es que, a diferencia de todos los demás medicamentos, no se inventó en un laboratorio. Es un elemento. Se encuentra en el mundo natural. Y se encuentra, por ejemplo, en las aguas de ciertos tipos de balnearios en Europa que, en el pasado, se jactaban del alto contenido de litio en su agua potable. Y así se fue infiltrando en la cultura del balneario. Se consideraba como un tónico para sentirse bien. Durante un tiempo, fue un ingrediente en un nuevo refresco de limón y lima que fue bastante popular hasta la década de 1950, y que luego cambió su nombre a 7UP [que hoy no contiene litio].

Pero había esta historia previa sobre el litio. Y además el litio… también se usa en todo tipo de cosas que no tienen nada que ver con la industria de la salud. Pero su éxito como producto para la salud cae en picado cuando se usa un compuesto de litio como base de un sustituto de la sal que termina, la gente cree, causando problemas cardíacos e incluso varias muertes. Y, entonces, AMA y luego la FDA emiten una advertencia solicitando “la retirada del mercado de estos sustitutos de la sal. Es un fármaco peligroso”. Y así, el uso de litio en psiquiatría surge en el contexto de dos hechos relevantes: uno, tiene una reputación [de repente] de ser peligroso y, dos, no va a dar mucho dinero a una compañía farmacéutica, porque no puede patentarlo… Creo que hay mucha gente que dice que es un medicamento muy bueno. Y hay algunas personas que todavía toman litio. El problema con el litio [para los fabricantes de medicamentos] es que no era rentable.

Sobre por qué las compañías farmacéuticas están abandonando el campo psiquiátrico
Porque no ha habido nuevas ideas buenas sobre dónde encontrar biomarcadores u objetivos nuevos desde los años sesenta. La única posible excepción es que ahora hay algo de entusiasmo con la ketamina, que se dirige a un conjunto diferente de sistemas bioquímicos. Pero la I + D es muy cara. Estos medicamentos están ahora, en su mayoría, fuera de patente… Los esfuerzos [de las compañías farmacéuticas] para producir nuevos medicamentos, siguiendo el procedimiento científico, con ensayos clínicos aleatorios etc…han estado enfrentando problemas casi inexplicables pero indudables por el efecto placebo.

Pero eso no significa que los medicamentos no funcionen. Solo significa que el efecto placebo es realmente fuerte. Pero la lógica de los ensayos clínicos es que el efecto placebo no es nada, y hay que ser capaz de ser mejor que nada. Pero, claro, si el efecto placebo no es simplemente nada, entonces quizás deba replantearse lo que significa probar un medicamento. Ahora, esto va más allá de lo que deberían hablar los historiadores, pero parece que las compañías farmacéuticas tienen un gran problema con el placebo.