Por cada dólar invertido en I+D, reciben un retorno de aproximadamente US$14,5.
Las compañías suelen utilizar el coste sustancial de la investigación para justificar el alto precio de los fármacos contra el cáncer [1]. En 2017, un estudio de 10 fármacos oncológicos mostró que las ventas de estos fármacos generaron siete veces más ingresos en cuatro años que el coste de la inversión en investigación y desarrollo (I+D) [2]. Un nuevo estudio, esta vez sobre 99 fármacos oncológicos aprobados por la FDA entre 1989 y 2017, mostró una rentabilidad aún mayor: cada US$1 invertido en I+D a finales de 2017 estaba generando una mediana de ingresos de US$14,5 dólares (rango US$3,3 a alrededor de US$55) [1].
En este estudio, los costes estimados en I+D tuvieron en cuenta el riesgo de fracaso del ensayo clínico y fueron comparables a las estimaciones de la industria farmacéutica. En la mayoría de los casos, los datos sobre los ingresos generados por las ventas de los fármacos se extrajeron de sus informes económicos [1].
A partir de estos y otros resultados, la Organización Mundial de la Salud, de la que los tres autores del estudio son miembros, hace un llamamiento para fortalecer las políticas que regulan los precios de los fármacos oncológicos [1, 3]. Una gran cantidad de nuevos fármacos contra el cáncer se venden a precios exorbitantes, mientras que la mayoría de las veces solo proporcionan un beneficio terapéutico modesto [2].
Referencias