Puede ser de ayuda
Según un ensayo clínico en que los pacientes con anemia persistente, a pesar de recibir tratamiento con eculizumab no cumplían con los requisitos para recibir una transfusión, el pegcetacoplán fue más eficaz para aumentar los niveles de hemoglobina y reducir las transfusiones que continuar con el eculizumab. El pegcetacoplán expone a los pacientes a los efectos adversos conocidos de los inhibidores del complemento, incluyendo infecciones posiblemente mortales, cefaleas, trastornos gastrointestinales y reacciones por la infusión.
ASPAVELI – pegcetacoplán en solución para infusión subcutánea
Swedish Orphan Biovitrum
La primera administración se debería hacer en un entorno hospitalario.
La hemoglobinuria paroxística nocturna es una enfermedad genética rara en la que se producen glóbulos rojos con una sensibilidad anormal a la hemolisis mediada por la activación del complemento. Se manifiesta como una anemia hemolítica crónica, a menudo acompañada de hemoglobinuria nocturna intermitente. Las complicaciones principales son infecciones, trombosis e insuficiencia renal. El tratamiento se basa principalmente en las transfusiones de sangre y, en ocasiones, un inhibidor del componente del complemento C5, como el eculizumab [1-3].
El pegcetacoplán está compuesto por una molécula de péptido unida a un polietilenglicol (PEG) para alargar su semivida de eliminación. Se une al componente del complemento C3 y lo inhibe. Ha sido autorizado en la UE para su uso en adultos con hemoglobinuria paroxística nocturna, como tratamiento de segunda línea cuando la anemia persiste a pesar de recibir tratamiento con un inhibidor del complemento C5 durante al menos tres meses [2,4].
Para este problema, la evaluación clínica del pegcetacoplán se basa principalmente en un ensayo clínico aleatorizado sin enmascaramiento que lo comparó con el eculizumab; incluyó a 80 adultos que padecían anemia persistente (nivel de hemoglobina inferior a 10,5 g/dl) a pesar de recibir tratamiento con eculizumab durante al menos tres meses. Habría sido útil incluir a un tercer grupo —que recibiera transfusiones de sangre y un placebo— para hacer una mejor evaluación del posible beneficio que tendría cambiar de medicamento [2,3].
Cuando se inscribió a los pacientes y, a pesar de la aleatorización, había un cierto desbalance entre los grupos en cuanto a las características de su hemoglobinuria paroxística. El 51% de los pacientes en el grupo que recibió pegcetacoplán en vez del eculizumab había recibido al menos cuatro transfusiones durante los 12 meses previos, comparado con el 59% de los pacientes en el grupo que siguió recibiendo eculizumab [2].
Al inscribirse, la media del nivel de hemoglobina fue de 8,7 g/dl en ambos grupos. Durante el transcurso del ensayo clínico de 16 semanas, el pegcetacoplán fue más eficaz que el eculizumab para aumentar los niveles de hemoglobina (el criterio de valoración principal): +2,3 g/dl en el grupo pegcetacoplán frente a -1,5 g/dl en el grupo eculizumab (p<0,0001). Se informó una normalización de los niveles de hemoglobina en aproximadamente un tercio de los pacientes en el grupo pegcetacoplán, frente a ninguno en el grupo eculizumab. El 85% de los pacientes en el grupo pegcetacoplán no requirió transfusiones, frente al 15% en el grupo eculizumab (se demostró la no inferioridad, pero no fue un análisis estadístico de superioridad según el protocolo del estudio). El desbalance entre los grupos respecto a los requerimientos de transfusiones antes de la inclusión quita solidez a los resultados. Es posible que exista una diferencia, pero se desconoce su magnitud. Al parecer, la eficacia del pegcetacoplán se mantiene después de las 48 semanas de tratamiento [2,5].
El perfil de efectos adversos del pegcetacoplán se puede prever por los efectos conocidos de los inhibidores de complementos: consisten principalmente en infecciones, sobre todo por meningococos (que pueden ser mortales), cefalea, trastornos gastrointestinales, reacciones por la infusión y un posible aumento del riesgo de cáncer a largo plazo. En el ensayo clínico descrito arriba, los efectos adversos del pegcetacoplán fueron en su mayoría los previstos. Se informaron reacciones en el lugar de la inyección con más frecuencia en el grupo pegcetacoplán: en el 37% de los pacientes frente al 3% en el grupo eculizumab, incluyendo inflamación, induración y hematomas [1-3].
Los estudios con animales han demostrado un aumento de la mortalidad fetal. El resumen de las características del producto recomienda que se evite el uso de pegcetacoplán durante el embarazo, y que las mujeres que pudieran quedar embarazadas utilicen anticonceptivos durante el tratamiento y durante al menos ocho semanas después de terminarlo [4].
Dado que es posible administrar el pegcetacoplán en el hogar, es una pena que el empaquetado no incluya los elementos necesarios para su administración.
En respuesta a nuestra solicitud de información, Swedish Orphan Biovitum nos proveyó documentos administrativos y artículos publicados, así como elementos relacionados con el empaquetado.
Revisión de la literatura hasta el 5 de septiembre de 2022