Según los datos recopilados por la Unidad de Supervisión Deontológica (USD) de Farmaindustria, la industria farmacéutica contribuyó con €232 millones a la formación continuada de los profesionales de la salud en España, en 2023. Así lo afirma el artículo publicado en La Vanguardia que resumimos a continuación [1].
De esta cantidad, €128 millones se destinaron a las organizaciones responsables de organizar reuniones y congresos científico-profesionales y €104 correspondieron a ayudas a profesionales de la salud para facilitar su participación en este tipo de encuentros.
Estos niveles de gasto son parecidos a los que se efectuaban antes de la pandemia, cuando dejaron de hacerse reuniones presenciales.
Asimismo, las empresas destinaron €335 millones para las organizaciones y profesionales de la salud que realizaron actividades de investigación y desarrollo de nuevos tratamientos, 22 millones más que en 2022.
Los pagos por prestación de servicios profesionales alcanzaron un valor global de €90 millones, y las donaciones, que sólo pueden otorgarse a organizaciones sanitarias ascendieron a €41 millones.
Las colaboraciones económicas entre industria farmacéutica y los agentes del sector alcanzaron el pasado año los €698 millones.
Según la noticia, España es el único país de Europa que, dentro de un sistema de autorregulación, publica el 100% de estas transferencias de valor con organizaciones y profesionales sanitarios de forma individualizada.
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