Síntesis
Es intolerable que el sistema sanitario público se vea sometido a la presión que suponen miles de médicos que aceptan “transferencias de valor” de las industrias farmacéuticas, una cuestión que sería vista como corrupción en el resto de la Administración.
En el campo de las enfermedades infecciosas, resulta incomprensible que el Ministerio de Sanidad asista impasible al “riego” de dinero de empresas farmacéuticas del campo de las vacunas pues, además de sobreprecios e irracionalidad en su uso, se provoca el descrédito de las mismas.
Es hora de que se tomen medidas para atajar un problema que conlleva daño a la población y al sistema sanitario público.
“Transferencias de valor”
Las industrias farmacéuticas abonan cantidades millonarias a los médicos y a sus sociedades científicas en forma de “transferencias de valor”, pagos por todo tipo de cosas, desde comidas, alojamientos y viajes a remuneración por informes y charlas.
Tales cantidades no se pagan al azar sino a médicos y sociedades científicas que pueden rentabilizar los medicamentos que producen las industrias farmacéuticas, de forma que son inversiones para promover el consumo de algunos medicamentos concretos.
Medicamentos que compra el sistema sanitario público con fondos generados por los impuestos. Medicamentos en muchos casos innecesarios y de precio abusivo y, por ello, para que se compren, se precisan las “transferencias de valor” que sesgan las recomendaciones de los médicos a pacientes y a la Administración. Estas compras a precios abusivos es una especie de extorsión, con daños en España y en el mundo entero (millones de personas mueren por no poder pagar los medicamentos).
Un estudio en EE UU sobre “transferencias de valor” a oncólogos demostró que “la prescripción del fármaco asociado aumenta un 4% en los doce meses después de recibir el pago, y el aumento comienza bruscamente en el mes del pago y desaparece al cabo de un año. Si bien los pagos resultan en un mayor gasto en medicamentos contra el cáncer, no hay mejoras asociadas en la mortalidad de los pacientes” [1]
Lo que las multinacionales farmacéuticas llaman transferencias de valor es, sin serlo legalmente, lo más parecido a lo que para los funcionarios sería corrupción, cohecho; pero se obra el milagro y tal corrupción se convierte en “valor”.
Nota de Salud y Fármacos: Para leer más sobre este tema, y sobre los médicos españoles que más dinero han recibido de los productores de vacunas puede ir al enlace que aparece en el encabezado, incluyendo los miembros de la comisión nacional de vacunas.
Referencias