En un histórico diálogo académico organizado por el South Centre, expertos y políticos se reunieron para debatir la innovadora estrategia de Argentina para frenar el evergreening (perennización de patentes) mediante rigurosas directrices de examen de patentes [1]. La práctica de conceder patentes «secundarias», que amplían los monopolios de mercado de las empresas farmacéuticas al cubrir formas alternativas de moléculas conocidas o nuevos usos médicos, se ha limitado significativamente en Argentina, sentando un nuevo precedente mundial.
Principales puntos del debate
Cambio en el examen de patentes después de 2012
El profesor Ken Shadlen, de la London School of Economics, presentó su investigación, destacando un cambio drástico en las prácticas de examen de patentes de Argentina desde 2012. Su análisis de las solicitudes de patentes y los resultados mostró que las directrices de Argentina han sido muy eficaces para reducir el número de patentes secundarias. Antes de 2012, las patentes farmacéuticas se concedían con mayor facilidad. La introducción de nuevas directrices ha dado lugar a una mayor tasa de rechazo de patentes secundarias, alineando la práctica legal con los objetivos políticos.
Estrategias multinacionales e impacto local
El Prof. Carlos Correa, Director Ejecutivo del South Centre, detalló cómo las multinacionales farmacéuticas utilizan a menudo la perennización (el evergreening) y las marañas de patentes para bloquear la competencia. Estas estrategias consisten en obtener múltiples patentes sobre una única molécula para ampliar sus periodos de monopolio. Las directrices políticas de Argentina, desarrolladas para contrarrestar estas prácticas, han sido cruciales para mitigar su impacto.
Un caso significativo fue el de BMS, que era titular de una patente para una formulación de didanosina de liberación prolongada e intentó impedir que el Ministerio de Sanidad argentino importara el medicamento. Esto dio lugar a una investigación sobre las reivindicaciones de patentes, que reveló la existencia de un elevado número de patentes «evergreening». Las directrices resultantes, basadas en las recomendaciones de la OMS y de UNCTAD, se adoptaron en 2012 para evitar estas prácticas.
Impacto de las Directrices
La investigación del profesor Shadlen descubrió que el 63% de las patentes en su base de datos eran patentes primarias, mientras que el 37% eran solicitudes secundarias. Las directrices condujeron a una reducción significativa de las patentes secundarias, con un alto índice de rechazo, y con el retiro o el abandono de muchas solicitudes. Esto ha permitido una mayor competencia de genéricos, una vez que expiran las patentes primarias.
Consideraciones futuras e implicaciones internacionales
Juan Correa, del Instituto Max Planck de Innovación y Competencia, destacó la importancia de las directrices argentinas para el acceso a los medicamentos y la producción local. También planteó preguntas sobre el posible impacto de la adhesión de Argentina al Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT). El profesor Shadlen sugirió que, dado que las directrices están bien integradas en las prácticas de la oficina de patentes, es probable que el PCT tenga un impacto limitado en el examen de las patentes farmacéuticas.
Peter Maybarduk, de Public Citizen, subrayó la importancia de la estrategia argentina para el resto del mundo. Señaló los paralelismos con los esfuerzos de EE UU para negociar los precios de los medicamentos y sugirió que EE UU podría beneficiarse de directrices similares. Cabe destacar que, por primera vez en más de una década, el informe especial 301 de EE UU no ha criticado las directrices de Argentina en materia de examen de patentes.
Conclusión
Las rigurosas directrices de examen de patentes de Argentina han establecido un nuevo estándar en la lucha contra el evergreening, garantizando que el sistema de patentes fomente la innovación sin ahogar la competencia. Han abierto oportunidades para que las industrias locales proporcionen medicamentos asequibles, demostrando un modelo de éxito para otros países. El diálogo en el Centro del Sur subraya la importancia de la cooperación internacional permanente y de la innovación política en materia de propiedad intelectual y salud pública.