A pesar de que las compañías farmacéuticas están mejorando su eficiencia en I+D, su éxito dependerá de lo bien que realicen sus asociaciones con otras firmas en puntos específicos del espectro de desarrollo, de acuerdo con el Centro Tufts para el Estudio de Desarrollo de Fármacos de EE.UU.
“Los fabricantes de fármacos han hecho un progreso importante reduciendo los tiempos en I+D, pero debido a que sólo 3 de cada 10 nuevos fármacos -de promedio- generan suficiente renta para sostener la I+D, las firmas farmacéuticas y biotecnológicas están bajo una gran y creciente presión para generar ingresos que permitan traer nuevos productos al mercado”, comentó el director del Centro Tufts, Kenneth Kaitin, en relación a la edición de esta semana de la Proyección 2010 sobre tendencias farmacéuticas y biofarmacéuticas.
“La realidad es que los lanzamientos de productos no siguen el ritmo de las expiraciones de patentes”, añadió. De acuerdo con el Centro Tufts, las ventas mundiales para todos los fármacos los cuales expirará su patente de 2009 a 2012 excederán los US$88.000 millones. Actualmente, los ensayos clínicos necesarios para conducir los diversos estudios y lograr la aprobación para comercializar un fármaco nuevo en los EE.UU. supone un coste medio de más de US$1.000 millones y representa más de siete años de trabajo desde el inicio del mismo.
Kaitin observó que, mientras que las nuevas tecnologías y los mejores diseños de protocolo están ayudando a mejorar la eficiencia de la I+D, “el éxito futuro para muchos patrocinadores dependerá de su capacidad para colaborar con otras compañías farmacéuticas y de cuán bien se asocien con proveedores de servicios extranjeros”.