Economía y Acceso
Genéricos
En EE UU se disparan los precios de algunos genéricos
Dennis Thompson
Healthday, 12 de noviembre de 2014
http://www.healthfinder.gov/news/newsstory2.aspx?docid=693717
Editado por Salud y Fármacos
Las fuerzas del mercado [nota del editor: léase las empresas] están aumentando dramáticamente el costo de algunos fármacos genéricos, promoviendo en EE UU algunas investigaciones sobre los precios de lo que deberían ser alternativas baratas a los medicamentos de marca.
Unos genéricos que deberían costar unos centavos por dosis han sufrido aumentos dramáticos en el precio en los últimos años, lamentó el Dr. Aaron Kesselheim, autor de un nuevo comentario en la revista New England Journal of Medicine, y director del Programa de Regulación, Terapias y Leyes del Hospital Brigham and Women’s, en Boston.
Por ejemplo, la doxiciclina, un antibiótico de amplio espectro de uso muy común, ha aumentado de 6,3 centavos a US$3,36 por pastilla. Y la clomipramina, un antidepresivo establecido hace tiempo, ha aumentado de 22 centavos a US$8,32 por pastilla, anotó Kesselheim en su comentario.
Señaló que problemas de la cadena de suministro y de la fabricación son responsables de algunos de estos aumentos en el precio. Pero Kesselheim considera que otros aumentos responde a que muy pocas compañías fabriquen las versiones genéricas..
“Damos por sentado que los genéricos son de bajo costo, pero solo son de bajo costo por la competencia. Cuando esa competencia desaparece, los precios aumentan”, advirtió Kesselheim. “Al dejar esto al mercado libre asumimos un riesgo”.
En respuesta a esos aumentos, tanto el Senado como el Departamento de Justicia de EE UU han iniciado investigaciones sobre los precios de los genéricos.
Los fiscales federales han citados a dos fabricantes de genéricos, buscando información sobre un posible arreglo entre los competidores, según el informe publicado. Al mismo tiempo, el Subcomité de Salud Primaria y Envejecimiento del Senado ha enviado cartas a los ejecutivos de 14 farmacéuticas pidiendo respuestas, y tendrá una audiencia sobre el tema el 20 de noviembre.
En el comunicado de prensa que anunciaba la audiencia, el senador Bernie Sanders, independiente del estado de Vermont dijo: “Tenemos que averiguar cual es la causa detrás de estos enormes aumentos de los precios. Se suponía que los genéricos debían ayudar a hacer que los medicamentos fueran asequibles para millones de estadounidenses que dependen de recetas para sus necesidades de salud, y ahora algunos de ellos se están volviendo inasequibles”.
En general, los medicamentos genéricos son baratos porque varias compañías producen versiones equivalentes de medicamentos de marca cuyas patentes han expirado, dijo Kesselheim.
Un representante del sector de los genéricos dijo que los fabricantes ya hace una contribución importante en la reducción de las facturas de los medicamentos de los consumidores.
Los medicamentos genéricos son una “parte esencial del esfuerzo de todo el sistema por mantener los costos de la atención de salud bajos”, aseguró Ralph Neas, presidente y director ejecutivo de la Asociación Farmacéutica de Medicamentos Genéricos (Generic Pharmaceutical Association), un grupo comercial.
Neas anotó que la principal firma analítica de atención médica mundial, el Instituto IMS de Informática de la Atención de Salud, por encargo de la Asociación Farmacéutica de Medicamentos Genéricos, encontró que los genéricos ahorraron US$209.000 millones en 2012, US$239.000 millones en 2013, y casi US$1.500 millones en la última década.
Pero los precios de algunos genéricos han aumentado porque algunos fabricantes se han fusionado o han dejado de producir esos fármacos, creando casi un monopolio o un monopolio real, plantea Kesselheim. Eso sucedió con la digoxina, un medicamento oral que se usa para la fibrilación auricular y la insuficiencia cardiaca, anotó en su editorial.
El número de fabricantes de digoxina genérica se redujo de ocho a tres entre 2002 y 2013, después de unas retiradas de fármacos e inspecciones relacionadas con la seguridad que realizó la FDA, escribió Kesselheim. Como resultado, el precio del fármaco aumentó en un 637%, según el editorial.
En su aumento más reciente, la digoxina pasó de 11 centavos a US$1,10 por pastilla entre octubre de 2012 y junio de 2014, anotó Sanders en el comunicado de prensa.
El precio de otros genéricos ha aumentado debido a la falta de suministros de los materiales brutos necesarios para producirlos, o a perturbaciones en el proceso de fabricación, comentó Kesselheim. Y añadió que por ejemplo la doxiciclina aumentó de precio debido a una carestía de los materiales brutos, que redujo la capacidad de fabricación, señaló.
Cuando suceden esas interrupciones en el mercado, para los fabricantes de medicamentos genéricos puede ser difícil ajustarse, según una declaración de la Asociación Farmacéutica de Medicamentos Genéricos.
“A diferencia de muchos otros tipos de productos, los fabricantes de fármacos genéricos no pueden simplemente acelerar la producción de inmediato”, señalaba la declaración de la asociación comercial. Las compañías deben cumplir con una serie de requisitos regulatorios, clínicos y legales, además de resolver cualquier problema con el proceso de fabricación.
Ronna Hauser, vicepresidenta de asuntos farmacéuticos de la Asociación Nacional de Farmacéuticos Comunitarios (National Community Pharmacists Association), dijo que es difícil atribuir los aumentos en los precios de algunos genéricos a algún factor individual.
“Los motivos del aumento en los costos varían”, dijo. “Es difícil determinar algún motivo en particular”.
Por eso las próximas audiencias del Senado son importantes, planteó Hauser.
“Intentamos crear un diálogo abierto y transparente para poder llegar a algunas de las razones principales de lo que ocurre”, afirmó. “No creo que haya habido alguna respuesta clara de parte de los fabricantes de medicamentos. Podrían decir que muchas cosas conducen a estos aumentos en los precios”.
Tanto Hauser como Kesselheim dijeron que es probable que estos aumentos en los precios solo ocurran en genéricos específicos, y que los medicamentos genéricos seguirán en general siendo menos caros que sus alternativas de marca.
En su artículo, Kesselheim anotó que la respuesta federal a estos aumentos en los precios de los genéricos hasta ahora ha sido limitada. Por ejemplo, la Comisión Federal de Comercio no intervendrá a menos que haya evidencia de que las medidas contra la competencia provocan un aumento sostenido en los precios.
Pero Kesselheim considera que la FDA tiene una oportunidad para la acción.
“Puede alertar al público y a los médicos y a otras compañías sobre el hecho de que esto sucede, y puede acelerar la aprobación de los productos de la competencia que de otra forma podrían estar al final de la cola del desarrollo de fármacos”, planteó.