La aparición y propagación de la resistencia a los antimicrobianos (RAMI) representa un grave desafío para la salud mundial. Solo en 2019, la RAMI causó 1,27 millones de muertes.
Los gobiernos han asumido una serie de compromisos para enfrentar la RAMI, por ejemplo, el Plan de Acción Mundial (PAM) de 2015 sobre la RAMI. Sin embargo, las prioridades sanitarias contrapuestas y la falta de recursos, sobre todo en países con altos índices de pobreza, han impedido avanzar hacia el cumplimiento de estos compromisos.
La respuesta global a la RAMI se puede beneficiar de las iniciativas que se están proponiendo para la prevención, preparación y respuesta a las pandemias (PPR), en vista de sus importantes superposiciones. Ambos retos mundiales exigen solidaridad internacional en lugar de medidas nacionalistas; una gobernanza integradora y mecanismos de financiación sólidos; mayor capacidad de vigilancia y de laboratorio; inversiones significativas en recursos humanos e infraestructuras para la prestación de servicios de salud, así como un mejor acceso a las soluciones médicas existentes y futuras.
Este informe pone de relieve las oportunidades que ofrecen las negociaciones en curso sobre el plan de prevención, preparación y respuesta a la pandemia para lograr avances significativos en materia de RAMI y recomienda objetivos concretos e indicadores medibles sobre cuestiones de importancia mutua.