Para una persona obesa o con sobrepeso, la principal estrategia para lograr la pérdida de peso y mantenerla es un enfoque integral que incluya, en particular, medidas dietéticas balanceadas nutricionalmente, aumento de la actividad física y asistencia personalizada. A menudo, los agonistas del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) liraglutida y semaglutida producen una pérdida de peso, pero parte de ese peso se recupera tras la interrupción del tratamiento. En un ensayo clínico, la proporción de pacientes que perdieron al menos un 5% de su peso corporal inicial fue del 87% en el grupo semaglutida, versus el 58% en el grupo liraglutida, versus el 29% en los grupos placebo. En otro ensayo clínico en aproximadamente 17.600 adultos obesos o con sobrepeso con enfermedad cardiovascular, la semaglutida redujo la incidencia de los episodios cardiovasculares más que el placebo (una diferencia de 1,5 puntos porcentuales), sin una reducción demostrada de la mortalidad. Sus efectos adversos, principalmente los trastornos gastrointestinales, fueron frecuentes y, a menudo, tan problemáticos que se interrumpió el medicamento o se usó una dosis más baja [1-3].
La tirzepatida es un agonista dual de GLP-1 y de GIP. Inicialmente, se la autorizó en la Unión Europea para tratar la diabetes tipo 2 y, posteriormente, se la autorizó “como complemento de una dieta reducida en calorías y un aumento de la actividad física para el manejo del peso, incluyendo la pérdida de peso y el mantenimiento del peso, en adultos con un índice de masa corporal (IMC) ≥ 30 kg/m² (obesidad) o ≥ 27 kg/m² a < 30 kg/m² (sobrepeso) en presencia de al menos una enfermedad concomitante relacionada con el peso” [4].
Este permiso de comercialización europeo se basa principalmente en un ensayo clínico aleatorizado, de doble ciego y controlado con placebo en 2539 pacientes. Al inicio, tenían un peso corporal promedio de 105 kg y un IMC promedio de 38 kg/m2. La proporción de pacientes que perdieron al menos un 5% de su peso corporal inicial después de 72 semanas de tratamiento fue del 85% al 91% en los grupos de 5 mg, 10 mg o 15 mg de tirzepatida, versus el 35% en el grupo placebo [4].
A mediados de 2024, se estaban ejecutando dos ensayos clínicos aleatorizados comparativos en pacientes con exceso de peso: el “Surmount-5” comparó a la tirzepatida con la semaglutida, y se espera conocer los resultados a finales de 2024; y el “Surmount-MMO” está evaluando la eficacia de la tirzepatida versus un placebo usando criterios de valoración clínicos (sobre todo, cardiovasculares), y los resultados se esperan para 2027 [4,5]. Revisaremos la evaluación de la tirzepatida cuando se publiquen los resultados de estos ensayos clínicos. Ya que a mediados de 2024 los únicos datos disponibles de las evaluaciones comparativas de la tirzepatida para este problema provenían de comparaciones con un placebo, no se ha demostrado que represente un avance terapéutico sobre la semaglutida.
Referencias