El 20 de enero de 2025 hubo un debate sobre el Tratado Bilateral de Inversión entre el Reino Unido y Colombia [1], durante el cual se preguntó al Gobierno del Reino Unido cómo han evaluado los recientes comentarios del ministro de Comercio colombiano respecto a las disposiciones de resolución de disputas entre inversionistas y el Estado.
En 2023 hubo £6.800 millones en inversiones bilaterales. El Gobierno del Reino Unido considera que el tratado es fundamental para las inversiones entre ambos países, pues las disposiciones de protección legalmente vinculantes ofrecen mayor certeza a los inversores, pues aseguran la protección de los inversores británicos y colombianos contra tratamientos injustos, discriminatorios y expropiaciones sin compensación adecuada [1].
Por su parte, el ministro de Comercio de Colombia ha comunicado que su país busca renegociar ciertas cláusulas. Las exportaciones de Colombia al Reino Unido, ascienden a £852 millones y se componen de frutas, verduras, carbón y café. Las exportaciones del Reino Unido a Colombia alcanzan £1.100 millones, principalmente en productos farmacéuticos y maquinaria [2].
Sin embargo, una de las preocupaciones que tiene Colombia se centra en una cláusula del acuerdo que dirige las disputas entre empresas británicas y el estado colombiano a un panel de arbitraje, el cual, según Colombia, tiende a favorecer a las corporaciones.
El reciente caso en el que Colombia ha otorgado una licencia obligatoria para la producción del medicamento dolutegravir, patentado por ViiV Healthcare, una subsidiaria de GSK, ha puesto a prueba las relaciones, y el caso se encuentra bajo consideración de un organismo de resolución de disputas en Washington.
Se ha observado que, mediante la concesión de dicha licencia, Colombia quiere ser considerada como un igual en las relaciones internacionales, siguiendo el ejemplo de Brasil en acciones similares.
De cara al caso de ViiV Healthcare y el Gobierno colombiano, los lores del Gobierno del Reino Unido se cuestionan si, en caso de renegociar el acuerdo, se garantizarán los derechos de los inversores británicos, especialmente sobre derechos de propiedad intelectual.
Fuente Original
Referencias