ANTIBIÓTICOS EN EL TRATAMIENTO DE LA BRONQUITIES AGUDA. CUATRO REVISIONES Y TODAVÍA NO TENEMOS RESPUESTA. EL PROBLEMA ESTÁ EN NUESTRAS DEFINICIONES CLÍNICAS. (Antibiotics For acute bronchitis. Four reviews and still no answers: our clinical definitions are at fault) Arroll B y Kenealy T British Medical Journal 2001; 322:939-40 La bronquitis aguda es uno de los motivos más frecuentes de consulta. Se han hecho cuatro revisiones sistemáticas comparando el uso de antibióticos con el uso de placebos pero los resultados no son útiles para la práctica clínica. Tres de los estudios incluían un meta-análisis y el otro era una revisión cualitativa de la literatura. Las cuatro revisiones incluyen casi los mismos estudios, y las cuatro revisiones llegan a conclusiones poco útiles. La conclusión más negativa afirma que "la literatura existente no apoya el uso de antibióticos para la bronquitis aguda", la conclusión más positiva dice " los antibióticos pueden ofrecer alguna ventaja a un grupo limitado de pacientes." Los autores creen que estos resultados enmascaran los beneficios que los antibióticos pueden representar para un grupo relativamente pequeño de pacientes con neumonía que se pierden entre un mayor grupo de pacientes que no presentan infección bacteriana, es decir los que presentan una infección viral, broncoespasmo o una infección bacteriana de poca importancia. El problema estriba en que se han utilizado múltiples definiciones de bronquitis como si todas pudiesen constituir una sola entidad clínica. Los ensayos clínicos originales incluyen a pacientes con tos y esputo, incluyendo esputo purulento, en su definición. Esto contradice la definición aceptada de bronquitis, que está basada en consenso no en evidencia, en la que se establece que los casos de bronquitis se caracterizan por tos aguda y signos de problema de vías respiratorias bajas. Los signos de problema de vías respiratorias bajas son importantes para nuestro argumento pues mientras se puede confirmar el diagnóstico de neumonía en pacientes que no presentan signos, no se puede descartar ese diagnóstico cuando los signos están presentes. Todos los estudios originales menos uno descartaron a los pacientes con neumonía, pero el método de exclusión fue diferente en cada uno de los estudios y en muchos casos la forma de exclusión no estuvo bien hecha. Esto no nos permite determinar si hay casos de bronquitis aguda bacteriana porque no sabemos cuantos de los pacientes presentaban neumonía. Lo único que podría ayudar a esclarecer la situación es una radiografía de tórax. Si en un protocolo de investigación se consiguiese demostrar que los antibióticos han sido útiles en el tratamiento de pacientes con problema de vías respiratorias bajas, tos productiva y radiografía normal entonces se podría decir que la bronquitis aguda bacteriana existe y en esos casos se puede recomendar la receta de antibióticos. La solución a corto plazo es analizar los estudios según la presencia de síntomas (tos productiva con esputo purulento o no) divididos en grupos según presenten signos de problema de vías respiratorias bajas o no. Es preferible tener menos casos pero asegurarse de que no se incluyen pacientes con neumonía. Mientras no haya información más concreta la recomendación al clínico es que la receta de antibióticos puede estar indicada cuando hay signos de problema de vías respiratorias bajas, y en pacientes de más de 55 años que se sienten enfermos y tienen tos diaria. El resto de pacientes parecen beneficiarse más del uso de broncodilatadores que de antibióticos. Traducido y editado por Núria Homedes |