ECONOMÍA Y ACCESO
Tratados de Libre Comercio, Exclusividad en el Mercado, Patentes
El gran premio: innovar sin monopolios (The great prize: innovating without monopolies)
Glyn Moody
Computerworlduk.com, 6 de junio de 2011
http://blogs.computerworlduk.com/open-enterprise/2011/06/the-great-prize-innovating-without-monopolies/index.htm
Traducido y editado por Salud y Fármacos
El 18 de noviembre de 2010, políticos europeos, expertos, la industria, organizaciones no gubernamentales y representantes de los pacientes se reunieron en el Parlamento Europeo en Bruselas para hablar de nuevos modelos de innovación biomédica y para formular recomendaciones para la Unión Europea (UE) que fueran congruentes con las conclusiones del Consejo de la UE sobre el papel de la UE en la salud global, y con la Estrategia 2020 de la UE para la innovación. Estos dos documentos de la UE recomiendan que se estudien modelos innovadores que desvinculen el costo de la investigación y desarrollo del precio de los medicamentos.
La reunión que tuvo lugar en el Parlamento Europeo durante la semana pasada concluyó que los descuentos que varios países europeos han hecho a los precios de los medicamentos patentados, la falta de innovación farmacéutica y el hecho de que los medicamentos representen una proporción creciente del presupuesto en salud ilustran que el modelo de innovación biomédica es insostenible e ineficiente, tanto para los países de bajos y medianos ingresos como para los países miembros de la Unión Europea.
Entre las propuestas que se discutieron figura la de los premios a la innovación farmacéutica para una variedad de problemas de salud incluyendo cáncer, VIH/sida y tuberculosis. Los políticos europeos mostraron interés en las propuestas y éstas también serán discutidas por el grupo consultivo de la OMS sobre financiamiento y coordinación de la investigación y desarrollo, que es responsable de implementar la estrategia global y el plan de acción en salud pública, innovación y propiedad intelectual.
El objetivo de la reunión en el Parlamento Europeo era ahondar la discusión sobre los premios a la innovación en tecnología médica y las propuestas de premios para descubrimientos dirigidos a responder a las necesidades y retos que enfrentan tanto los países más ricos como los países de bajos y medianos ingresos (PBMIs).
Hay muchas cosas que se tienen que tener en cuenta. Uno de los temas más importantes es encontrar la manera de proveer medicamentos de bajo costo a los PBMIs. Por ejemplo, en el mundo hay 33 millones de personas infectadas por el VIH, pero solo seis millones de residentes en PBMIs reciben tratamiento con antirretrovirales. Esto no debe sorprendernos, el costo anual de los antirretrovirales más baratos en esos países es de US$100 al año, mientras que los medicamentos más nuevos cuestan entre US$1.000 y US$12.000 al año. Estos precios no pueden ser absorbidos por los que tienen ingresos anuales que están por debajo de esas cantidades.
En EE UU se invierten anualmente US$9.000 millones en antirretrovirales, y a pesar de eso no pueden proveer medicamentos a todos los afectados. Es más, a medida que aumenta el número de infectados con VIH, los medicamentos más antiguos pierden su efectividad, por lo tanto los costos del tratamiento seguirán aumentando. Esto sucede con enfermedades prioritarias, hay muchas otros problemas de salud que afectan mayoritariamente a los PBMIs para los que no hay medicamentos disponibles a ningún precio, porque las compañías farmacéuticas occidentales consideran que son mercados de los que no pueden extraer beneficios, y por lo tanto no vale la pena investigar nuevas moléculas para esos mercados.
La reunión de Bruselas pretendía explorar estrategias para incentivar a las compañías farmacéuticas a producir medicamentos nuevos para tratar a los necesitados a precios bajos. Esto significa que hay que ofrecer premios importantes a los ganadores y que el proceso de adjudicación tiene que ser transparente. Los medicamentos premiados podrían ser subsecuentemente producidos por cualquier compañía como “genéricos”, las cuales los venderían a precios bajos.
En EE UU hay dos propuestas de ley que tienen como objetivo introducir estos métodos. A continuación resumo algunas de las ideas más importantes.
Las dos propuestas buscan eliminar las barreras a la producción y venta de versiones genéricas de medicamentos y vacunas. El proyecto de ley más ambicioso, es el Medical Innovation Prize Fund Act, que se aplicaría a todos los medicamentos de venta con receta. La otra propuesta es el Prize Fund for HIV/AIDS Act, que solo se aplicaría a medicamentos contra el VIH/Sida. La primera propuesta crearía un fondo equivalente al 0,55% del PIB de EE UU que representa más de US$80.000 millones. El fondo para investigar VIH/sida se financiaría con un 0,02% del PIB nacional, lo que representaría unos US$3.000 millones.
Las dos propuestas de ley incluyen elementos similares a la propuesta que el Senador Sanders había escrito sobre la creación de fondos para premios, pero con algunos cambios. Entre las modificaciones está la introducción de un dividendo por facilitar que el producto sea de dominio público, esto haría que el 5% del premio se destinara a las comunidades e individuos que hayan contribuido con conocimiento, datos, materiales o tecnología a la riqueza de información disponible en el dominio público, o les otorgaría acceso gratuito e indiscriminado a las patentes y otro tipo de protección de la propiedad intelectual. Esto representaría anualmente más de US$4.000 millones según la propuesta S 1137 y US$147 millones según la S 1138, todo de acuerdo con los valores del PIB de 2010.
Es decir, una cantidad considerable de dinero se reservaría para incentivar a los participantes a compartir conocimiento y mantener la competencia. Este es uno de los motivos por los que me interesa la idea, el otro es que las patentes se basan en un sistema que defiende la premisa de que los monopolios intelectuales son indispensables, y dicen que hay que mantener el sistema de patentes. Lo interesante de estas propuestas es que gratifican a las compañías por la innovación, y no les otorgan monopolios sobre el conocimiento, que es lo que después impide que la gente pueda acceder a medicamentos que salvan vidas porque no se pueden sacar beneficios vendiendo esos productos a precios asequibles.