PRESCRIPCIÓN, FARMACIA Y UTILIZACIÓN
Breves
Vacuna antineumocócica 13-valente: mayores de 50 años
Rev Prescrire 2012; 32(348):728-729
Traducido por Salud y Fármacos
Sin beneficio probado
En adultos, la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente parece que es más inmunogénica que la vacuna antineumocócica polisacárida 23-valente para la mayoría de los 12 serotipos en común. Sin embargo, a mediados de 2012, la vacunación rutinaria de adultos no tiene una eficacia probada.
La bacteria Streptococcus pneumoniae puede producir infecciones invasivas con riesgo para la vida, incluyendo bacteriemia, neumonía y meningitis [1]. En los países industrializados, los niños y adultos mayores de 65 años, los pacientes sometidos a una esplenectomía previa, los inmunocomprometidos y aquellos con una enfermedad de células falciformes, presentan un riesgo mayor que la población general [1,2].
A mediados de 2012, la eficacia de la vacuna antineumocócica polisacárida 23-valente en pacientes mayores de 65 años no está clara [2,3].
La vacuna antineumocócica conjugada 13-valente (Prevenar 13®, Pfizer) se autorizó inicialmente para su uso en niños pequeños [4]. El siguiente artículo examina su balance daño-beneficio en adultos mayores de 50 años, cuya indicación se ha aprobado recientemente.
Inmunogénico. A mediados de 2012, la vacunación de adultos con la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente solo se había evaluado en términos de inmunogenicidad, pero no en términos de infecciones invasivas o mortalidad [5].
Un ensayo clínico en curso llamado Capita compara la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente con la vacunación con placebo en términos de criterios de valoración clínicos en aproximadamente 84.500 adultos. Los resultados deberían estar disponibles a finales de 2013 [5].
La evaluación de esta indicación se basa principalmente en dos ensayos de doble ciego, aleatorizados, de no inferioridad que comparan la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente con la vacuna antineumocócica polisacárida 23-valente en un total de 1.773 adultos mayores de 60 años [5]. Los pacientes inmunocomprometidos no se incluyeron en estos ensayos.
La respuesta inmune a los 12 serototipos vacunales compartidos por ambas vacunas fue "no inferior" con la vacuna conjugada 13-valente en comparación con la vacuna polisacárida 23-valente y fue más acentuada para la mayoría de los serotipos [5].
Perfil de efectos adversos confirmado. Si tenemos en cuenta todos los ensayos realizados en adultos mayores de 50 años (n=6.198), el perfil de efectos adversos de la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente es similar a la observada en niños [4,5].
No hubo diferencias significativas entre los grupos vacunados con la vacuna conjugada o polisacárida [5]. Las reacciones adversas fueron normalmente leves y transitorias, con reacciones locales en el sitio de inyección (enrojecimiento, hinchazón dolor) y reacciones sistémicas (fatiga, cefalea, fiebre, escalofríos, erupción cutánea, pérdida de apetito, mialgia, artralgia) [5]. De acuerdo con los investigadores, dos eventos adversos graves se “relacionaron posiblemente” con la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente: un caso del síndrome de Guillain-Barré y un caso de púrpura trombocitopénica idiopática [5].
En la práctica. A mediados de 2012, no hay evidencias de que la vacuna antineumocócica conjugada 13-valente, así como la vacuna antineumocócica polisacárida 23-valente, sea efectiva en la prevención de enfermedades neumocócicas invasivas o fallecimientos en adultos mayores de 50 años. Aún pendiente de la publicación de los resultados completos del ensayo Capita, esta vacuna no debe prescribirse de forma rutinaria a los adultos.
Referencias
En respuesta a nuestra petición de información, Pfizer no nos proporcionó ninguna información sobre su producto.