Hace mucho tiempo que se está hablando de la necesidad de modificar el sistema de precios de referencia. Su rigidez ha empujado a muchos medicamentos innovadores a problemas de disponibilidad motivados por la falta de viabilidad económica resultante de un método de cálculo de los precios máximos de financiación que es poco flexible.
Por otro lado, algunos actores sostienen que la competencia entre medicamentos que forman parte del mismo conjunto de referencia es escasa. Así lo expresa la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en su estudio de mayo de 2022 sobre el mercado de distribución mayorista de medicamentos. La relevancia del tema lo ha llevado hasta el Congreso de los Diputados, donde se han analizado las carencias del sistema. Dos grupos parlamentarios, el republicano y el plural, propusieron que el proyecto de ley de creación y crecimiento de empresas incluyera una disposición final de modificación de la Ley de Garantías con el fin excluir los medicamentos patentados del sistema de precios de referencia.
Finalmente, el Congreso acordó no modificar la Ley de Garantías en este momento, pero instar al gobierno a promover en el plazo de 6 meses desde la entrada en vigor de la ley de creación y crecimiento de empresas, “las medidas legales oportunas que permitan modificar el sistema de precios de referencia introduciendo elementos que incrementen la competencia y valoren las aportaciones que suponen un beneficio incremental en la utilización de medicamentos”.
La posición adoptada por el Congreso nos lleva a la consulta pública del anteproyecto de ley de modificación de la Ley de garantías, que se refiere a la reforma del sistema de precios de referencia en los mismos términos.