Resumen
Importancia. La aspirina a dosis bajas se ha utilizado ampliamente para la prevención primaria y secundaria del ictus. En los individuos de edad avanzada no se ha establecido el equilibrio entre la reducción potencial de los accidentes cerebrovasculares isquémicos y el aumento de la hemorragia intracraneal.
Objetivo. Establecer los riesgos de ictus isquémico y hemorragia intracraneal entre personas mayores sanas que reciben diariamente dosis bajas de aspirina.
Diseño, entorno y participantes. Este análisis secundario del ensayo aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo Aspirin in Reducing Events in the Elderly (ASPREE) en el que se administraron dosis bajas diarias de aspirina se llevó a cabo entre personas residentes en la comunidad que vivían en Australia o EE UU. Los participantes eran adultos mayores sin enfermedad cardiovascular sintomática. El reclutamiento tuvo lugar entre 2010 y 2014, y se dio seguimiento a los participantes durante una mediana (IQR) de 4,7 (3,6-5,7) años. Este análisis se completó entre agosto de 2021 y marzo de 2023.
Intervenciones. Aspirina diaria de 100 mg con recubrimiento entérico o placebo equivalente.
Medidas y resultados principales. El ictus y la etiología del ictus fueron los resultados secundarios predeterminados y se presentan desde el punto de vista de la prevención del ictus inicial o de la hemorragia intracraneal. Los resultados se evaluaron mediante la revisión de las historias clínicas.
Resultados. Entre 19.114 adultos mayores (10.782 mujeres [56,4%]; mediana [IQR] de edad, 74 [71,6-77,7] años), 9.525 individuos recibieron aspirina y 9.589 individuos recibieron placebo. La aspirina no produjo una reducción estadísticamente significativa de la incidencia de ictus isquémico (cociente de riesgos [CR], 0,89; IC 95%, 0,71-1,11). Sin embargo, se observó un aumento estadísticamente significativo de la hemorragia intracraneal entre los individuos asignados a aspirina (108 individuos [1,1%]) en comparación con los que recibieron placebo (79 individuos [0,8%]; HR, 1,38; IC 95%, 1,03-1,84). Esto se debió a un aumento de la combinación de hemorragia subdural, extradural y subaracnoidea entre los tratados con aspirina en comparación con placebo (59 individuos [0,6%] frente a 41 individuos [0,4%]; CR, 1,45; IC del 95%, 0,98-2,16). Se registró ictus hemorrágico en 49 individuos (0,5%) asignados a aspirina frente a 37 individuos (0,4%) en el grupo placebo (CR, 1,33; IC 95%, 0,87-2,04).
Conclusiones y relevancia. Este estudio halló un aumento significativo de eventos de hemorragia intracraneal entre los que consumieron dosis bajas de aspirina diariamente, sin que hubiera una reducción significativa del ictus isquémico. Estos hallazgos pueden tener especial relevancia para los individuos de edad avanzada propensos a desarrollar hemorragias intracraneales tras un traumatismo craneoencefálico.