Una nueva ley aprobada en Ohio amplía enormemente el poder de los farmacéuticos, permitiéndoles hacer mucho más que dispensar medicamentos. Conseguir que se aprobara la ley no ha sido fácil, y otros estados que deseen cambiar sus leyes de farmacia pueden aprender de la experiencia de Ohio.

“La idea de este proyecto de ley ha sido discutida en nuestra asociación durante un poco más de 10 años”, dijo Antonio Ciaccia, director de gobierno y asuntos públicos de la Asociación de Farmacéuticos de Ohio.

La aprobación del proyecto de ley de la Cámara 188 (HB 188) el 23 de marzo de 2016, permite a los farmacéuticos hacer varias cosas, incluyendo pruebas y análisis de sangre y orina, y modificar el régimen farmacológico de un paciente en base a los resultados. La ley simplifica el trámite de acuerdos de colaboración para permitir que los médicos establezcan un acuerdo con múltiples farmacéuticos, para administrar el tratamiento farmacológico de los pacientes.

La ley también permite a los farmacéuticos renovar una receta para proveer 30 días de tratamiento cuando la receta original ha caducado y no se puede contactar al médico. “Si ese medicamento se dispensa en cantidades superiores a las requeridas para los 30 días de tratamiento y no se puede fraccionar, permitimos la unidad de medida más baja que sea posible”, dijo Ciaccia.

Scott Knoer, MS, PharmD, FASHP, jefe de farmacia en la Clínica Cleveland, dijo que estaba muy satisfecho con la nueva ley. “Tuvimos un acuerdo de práctica colaborativa durante unos 15 años, pero era muy restrictivo. Tenía que ser entre un farmacéutico, un médico y un paciente. No permitía que un farmacéutico iniciara una nueva terapia “, dijo el Dr. Knoer. “HB 188 permite a los farmacéuticos de Ohio, por primera vez, agregar, modificar o interrumpir un fármaco, y ordenar pruebas de laboratorio apropiadas dentro del alcance del acuerdo de consulta, sin requerir la firma de un médico calificado”.

Pocas limitaciones
La mayoría de los estados tienen algún tipo de acuerdo de colaboración, pero lo que está permitido varía según el estado. “En cuanto a los acuerdos de colaboración en Ohio, no hay límites en lo que los farmacéuticos pueden hacer, aparte de los que el médico imponga al farmacéutico, por lo que nuestro estado es uno de los más liberales”, dijo Ciaccia.

Otros están de acuerdo. “Con esta ley, Ohio se está uniendo al grupo de estados más adelantados, con leyes de práctica colaborativa sólidas y modernas”, dijo Joseph M. Hill, director de la División de Relaciones Gubernamentales de la American Society of Health-System Pharmacities (ASHP). Dijo que otros estados con acuerdos de colaboración liberal son California, Carolina del Norte, Oregón y Washington.

Numerosos factores contribuyeron al éxito de HB 188, incluyendo el trabajo con las asociaciones médicas. “Cuando tuvimos nuestro proyecto de ley de 2014, era un proyecto de ley del Senado, teníamos al senador estatal David Burke, farmacéutico y republicano, quien fue su promotor, y no trabajamos mucho con la comunidad médica”, Ciaccia explicó. “Llevé a un grupo de farmacéuticos para que testificaran y se pudiera ver su calidad científica. Tuvimos tres audiencias, y el proyecto de ley murió, fué una muerte lenta y dolorosa”.

La Asociación Médica del Estado de Ohio paralizó el proyecto de ley. “Una de las cosas a las que el grupo de médicos se oponía era a identificarlo como ‘prescripción’, porque en su mente, prescribir conlleva la connotación de hacer un diagnóstico, y rechazan la idea de que un farmacéutico puede o debe hacer un diagnóstico”, dijo Ciaccia . “Hicimos algunos ajustes a la redacción y cambiamos a los representantes farmacéuticos que interaccionaron con los médicos. La Asociación Médica Estatal de Ohio y la Asociación Osteopática de Ohio fueron los grandes actores con los que trabajamos”. El lenguaje utilizado en la ley que dice que un farmacéutico puede agregar, eliminar o cambiar un medicamento, esencialmente proporciona autoridad prescriptiva sin llamarla así.

Tener médicos que testificaran en favor de la ley fue clave. La segunda vez, el proyecto de ley contó con el respaldo del representante de Ohio Steve Huffman, (republicano) que es médico, y de un médico de emergencias y vicepresidente del Comité de Salud y Envejecimiento de la Cámara de Representantes. “Necesitas que otras personas te avalen”, dijo Ciaccia. “Los farmacéuticos a menudo olvidan que la percepción de la profesión está fuera de la profesión. A cualquier persona que le pregunte qué hace el farmacéutico por lo general le dirán: Pasan pastillas de la botella grande a la botella pequeña y se pelean con mi compañía de seguros.’ No creo que mucha gente entienda que un farmacéutico tiene un entrenamiento farmacológico mayor que cualquier otro profesional de salud”.

La legislación que fue aprobada tenía casi dos docenas de cartas de apoyo y testimonios de médicos de Ohio. Tener a los médicos liderando el proyecto de ley lo convirtió en un proyecto de ley de los médicos más que de los farmacéuticos, explicó Ciaccia. Dos farmacéuticos y cuatro médicos ofrecieron testimonios orales en apoyo del proyecto de ley. Al dar prioridad al testimonio de proveedores de servicios de salud de diferentes profesiones y contextos de trabajo, las deliberaciones se mantuvieron centradas en el tema y fueron eficientes. “Si hay que llevar a 15 personas para que apoyen tu proyecto, me parece que lleva a pensar que uno está desesperado, y da a entender que no es deseable”, señaló.

Un sentido de urgencia
Otro elemento que ayudó a la aprobación del proyecto de ley de colaboración fue el sentido de urgencia que se le otorgó al añadir que la ley permitiría a los farmacéuticos ordenar la renovación de la receta cuando no se podía contactar al médico. Hace dos años, un paciente en el área de Cleveland murió por falta de insulina, en parte porque la ley estatal sólo permitía a una farmacia dispensar un suministro de 72 horas de un medicamento y la insulina no se puede fraccionar en esta dosificación. Se destacó ese caso durante las audiencias y sirvió para enfatizar la urgencia de aprobar la legislación.

El Dr. Knoer dijo que espera que más estados amplíen el poder de los farmacéuticos, a medida que su impacto se convierta en una fuerza importante en el reembolso de la atención médica y los médicos se den cuenta de que los farmacéuticos pueden contribuir a lograr mejores resultados.

Max Peoples Jr, propietario de Uptown Pharmacy, en Westerville, Ohio, dijo que con la aprobación de la ley, “un mayor porcentaje de farmacéuticos y un mayor porcentaje del tiempo del farmacéutico se dedicará al cuidado de los pacientes en lugar de a dispensar. A largo plazo, cree que los cambios en los acuerdos de consulta llevarán a una mayor aceptación por parte de los médicos de que formar equipo con los farmacéuticos les permitirá ver más pacientes y dar lugar a una mejor y más rápida atención.

“Lo que los cambios de Ohio demuestran es que los farmacéuticos necesitan estar activos en las organizaciones estatales y nacionales de farmacias y establecer relaciones también con otros profesionales de la salud para obtener su input y apoyo”, dijo Peoples. “Como mínimo, los farmacéuticos deben pertenecer al menos a dos organizaciones de farmacia, de modo que sus cuotas puedan apoyar los esfuerzos necesarios para realizar cambios legislativos. Sólo la rueda que chirría eventualmente se cambia”.