Un estudio de cohorte publicado en 2019, que utilizó una base de datos taiwanesa de seguros médicos, analizó la ocurrencia de un paro cardíaco repentino en pacientes que habían solicitado el reembolso de prescripciones de citalopram u omeprazol entre 2000 y 2005 [1].
Este estudio comparó cuatro grupos de pacientes: 3.882 pacientes expuestos a citalopram solo; 31.090 expuestos a omeprazol solo, 405 expuestos a citalopram + omeprazol y un grupo de control de 141.508 pacientes tratados con un antidepresivo que no conllevaba riesgo de prolongación del intervalo QT o con un inhibidor de la bomba de protones diferente al omeprazol. Se escogió este grupo control para reducir la posibilidad de confusión por indicación [1].
El riesgo de paro cardíaco repentino no fue mayor en el grupo tratado con omeprazol solo frente al grupo de control. Sin embargo, el riesgo fue mayor con citalopram solo, con un riesgo relativo estimado de 1,3 (intervalo de confianza del 95% [IC 95] de 1,2 a 1,5). La combinación de omeprazol y citalopram se asoció con un riesgo aún mayor de muerte cardiaca súbita, con un riesgo relativo estimado de 2,2 (IC 95: 1,8 a 2,8) [1].
El citalopram es un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) que se sabe prolonga el intervalo QR en el ECG y, por lo tanto, conlleva un riesgo de arritmia ventricular mortal. Este ISRS es metabolizado por la isoenzima CYP 2C19 del citocromo P450, y el omeprazol inhibe a esa isoenzima. La combinación de omeprazol con citalopram reduce el metabolismo y la eliminación de citalopram, lo que aumenta su concentración plasmática y sus efectos adversos dependientes de la dosis, en particular sus efectos cardíacos [2].
La actividad de la isoenzima CYP 2C19 varía entre los individuos, y los pacientes con baja actividad de la isoenzima tienen un mayor riesgo [1,2].
El escitalopram tiene los mismos efectos adversos cardíacos que el citalopram y también lo metaboliza la isoenzima CYP 2C19. No se ha demostrado que el escitalopram acarree un riesgo menor que el citalopram [2,3].
El esomeprazol, como el omeprazol, es un inhibidor de la isoenzima CYP2C19 del citocromo P450, con las mismas interacciones farmacológicas [2].
En la práctica, el citalopram y el escitalopram son antidepresivos que se deben evitar. No ofrecen ninguna ventaja en comparación con otros antidepresivos ISRS y conllevan un riesgo de muerte cardíaca súbita. Los profesionales de la salud deben advertir a los pacientes que estén tomando estos medicamentos, que eviten combinarlos con omeprazol o esomeprazol (y, en general, con cualquier inhibidor de la isoenzima CYP 2C19) porque aumentan este riesgo [4].
Referencias