Salud y Fármacos is an international non-profit organization that promotes access and the appropriate use of pharmaceuticals among the Spanish-speaking population.

PRESCRIPCIÓN, FARMACIA Y UTILIZACIÓN

Farmacia

Uruguay. Medicamentos en disputa”Discutir, hablar y transar” sobre distribución de medicamentos
El País, 16 de abril de 2010
http://www.elpais.com.uy/suple/empresario/10/04/16/elempre_482555.asp
http://www.elpais.com.uy/100416/ultmo-482890/ultimomomento/-discutir-hablar-y-transar-sobre-distribucion-de-medicamentos

El negocio de la venta de medicamentos en Uruguay está en disputa debido a que las farmacias vuelven a la carga con un proyecto en el que proponen ser los puntos exclusivos de venta del llamado “medicamento ambulatorio”; es decir, todo aquel que se receta al paciente cuando no está internado.

La iniciativa -que las farmacias agremiadas de todo el país entregarán al Seguro Nacional Integrado de Salud próximamente- consiste en que en un plazo paulatino las mutualistas dejen de ser un canal de distribución y que esa tarea sea sólo para farmacias.

A diferencia de lo que pasa en el resto del mundo, gran parte de la distribución en Uruguay es a través de las mutualistas y ese servicio se ha transformado en una fuente de financiación para las instituciones, debido a que en general con los medicamentos ambulatorios recaudan más por la venta de tickets de lo que pagan por los insumos.

Además, esos centros compran a un precio menor frente a las farmacias por el mismo producto como consecuencia de los grandes volúmenes que manejan y de la fuerte competencia entre los propios laboratorios por suministrarlos.

El año pasado se vendieron en el país 100 millones de remedios, de los cuales 37% fueron hacia las instituciones (parte para sus pacientes internados y el resto para las recetas médicas), 33,7% para farmacias y 24,5% a Salud Pública, según datos de la Cámara de Especialidades Farmacéuticas y Afines (CEFA). La recaudación de los laboratorios por su producción destinada al mercado local fue de US$ 332 millones.

El objetivo que los farmacéuticos buscan con este proyecto es volver a ser el principal suministrador de medicamentos con el argumento de que la rentabilidad del negocio ha ido en picada e incluso advierten que está en riesgo como consecuencia de la constante caída en la distribución.

Además, ofrecen como beneficio la cercanía con el usuario con una infraestructura de 1.200 puntos en todo el país. Las farmacias trabajan en este proyecto desde hace dos años y están a punto de presentarlo oficialmente. Como parte de su estrategia, los empresarios lograron el visto bueno del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para recibir un préstamo que les permita adquirir un complejo software para estar en red y llevar un registro de los stocks. Con esta idea, las farmacias quieren recuperar un negocio que fueron perdiendo a manos de las mutualistas.

El presidente de la Junta Directiva del Casmu, Gustavo Bogliaccini, expresó su disposición a discutir el proyecto de las farmacias para convertirse en distribuidoras exclusivas de remedios para pacientes ambulatorios. Hoy son las mutualistas quienes están a cargo.

“Si bien no estoy en conocimiento del proyecto y de cómo se instrumentaría, es lógico que ante una situación como esa habría reducción en la cantidad de funcionarios que trabajan en farmacia de la mutualista”, dijo Bogliaccini.

Aproximadamente un 80% de los empleados administrativos que cumplen funciones en las farmacias de la mutualista perderían su trabajo. En la mutualista, la venta de medicamentos para pacientes ambulatorios en el Casmu representa casi el 80% del total. El otro 20% son los utilizados para las internaciones.

“Es un tema a discutir, hablar y transar, si es un proyecto que tiene un enfoque social importante como mejorar la ecuación económica de las farmacias chicas, comunitarias, y hacer más accesible el medicamento para la gente, es una cosa, pero muy distinto es un proyecto que busque favorecer a una cadena”, señaló.

Bogliaccini hizo hincapié en que lo importante es que la ecuación le cierre a la gente. “Si les sale más barato cerca del barrio y puede ahorrarse dos boletos, bienvenido sea”, dijo. A su vez manifestó que el Casmu tiene unas 18 farmacias fuera de los sanatorios para entregar medicamentos en las periferias. “Inclusive, cuando el paciente paga un diferencial –que es menor a un boleto de ómnibus– vamos a la casa con los medicamentos”, afirmó.

modificado el 28 de noviembre de 2013