Resumen
Antecedentes. La resistencia a los antimicrobianos (RAM) representa una importante amenaza para la salud humana en todo el mundo. En publicaciones anteriores se ha calculado el efecto de la RAM en la incidencia, las muertes, la duración de la estadía hospitalaria y los costes de la atención en salud para combinaciones específicas de patógenos y fármacos, en determinados lugares. Hasta donde sabemos, este estudio es el que hasta ahora ha realizado las estimaciones más completas de la carga para la salud que representa la RAM.
Métodos. Se estimaron las muertes y los años de vida ajustados por discapacidad (AVAD) atribuibles y asociados a las RAM para 23 patógenos y 88 combinaciones patógeno-fármaco en 204 países y territorios en 2019. Obtuvimos datos de revisiones sistemáticas de la literatura, sistemas hospitalarios, sistemas de vigilancia y otras fuentes, que en total representan 471 millones de registros individuales o microorganismos aislados y 7.585 años-estudio-localización. Utilizamos modelos estadísticos predictivos para estimar la carga de la RAM para todos los lugares, incluyendo aquellos para los que no teníamos información.
Nuestra estrategia puede dividirse en cinco componentes generales:
Utilizando estos componentes, estimamos la carga de la enfermedad basándonos en dos elementos: las muertes atribuibles a la RAM (utilizando un escenario alternativo en el que todas las infecciones resistentes a los medicamentos fueron sustituidas por infecciones susceptibles a los mismos), y las muertes asociadas a la RAM (basadas en un escenario alternativo en el que todas las infecciones resistentes a los medicamentos fueron sustituidas por ninguna infección). Se generaron intervalos de incertidumbre (UI) del 95% para las estimaciones finales, como los valores ordenados en las posiciones 25 y 975 de 1.000 extracciones posteriores, y se validaron los modelos de forma cruzada para asegurar validez predictiva fuera de la muestra. Presentamos las estimaciones finales agregadas a nivel global y regional.
Resultados
En base a nuestros modelos estadísticos predictivos, se estimó que hubo 4,95 millones (3,62-6,57) de muertes asociadas con la RAM bacteriana en 2019, incluyendo 1,27 millones (95% UI 0,911-1,71) de muertes atribuibles a una RAM bacteriana. A nivel regional, estimamos que la tasa de mortalidad en todas las edades atribuible a la resistencia era más alta en el África subsahariana occidental, con 27,3 muertes por 100 000 (20,9-35,3), y la más baja en Australasia, con 6,5 muertes (4,3-9,4) por 100 000. Las infecciones de las vías respiratorias inferiores representaron más de 1,5 millones de muertes asociadas a la resistencia en 2019, lo que las convierte en el síndrome infeccioso más gravoso.
Los seis patógenos que ocasionaron con mayor frecuencia las muertes asociadas a la resistencia (Escherichia coli, seguido de Staphylococcus aureus, Klebsiella pneumoniae, Streptococcus pneumoniae, Acinetobacter baumannii y Pseudomonas aeruginosa) fueron responsables de 929.000 (660.000-1,270.000) muertes atribuibles a la RAM y de 3,57 millones (2,62-4,78) muertes asociadas a la RAM en 2019. Una combinación patógeno-fármaco, S aureus resistente a la meticilina, causó más de 100.000 muertes atribuibles a la RAM en 2019, mientras que otras seis causaron cada una entre 50.000 y 100.000 muertes: tuberculosis multirresistente, excluyendo la tuberculosis ampliamente resistente a los medicamentos, E coli resistente a las cefalosporinas de tercera generación, A baumannii resistente a los carbapenemes, E coli resistente a las fluoroquinolonas, K pneumoniae resistente a los carbapenemes y K pneumoniae resistente a las cefalosporinas de tercera generación.
Interpretación. Hasta donde sabemos, este estudio es la primera evaluación exhaustiva de la carga mundial de la RAM, así como una evaluación de la disponibilidad de datos. La RAM es una de las principales causas de muerte en todo el mundo, con las mayores cargas en los entornos de bajos recursos. Entender la carga de la RAM y las principales combinaciones de patógenos y fármacos que contribuyen a ella es crucial para tomar decisiones políticas informadas y específicas para cada lugar, en particular para los programas de prevención y control de infecciones, el acceso a los antibióticos esenciales y la investigación y el desarrollo de nuevas vacunas y antibióticos. En muchos entornos de bajos ingresos existen graves carencias de datos, lo que pone de relieve la necesidad de ampliar la capacidad de los laboratorios de microbiología y los sistemas de recogida de datos para mejorar nuestra comprensión de esta importante amenaza para la salud humana.
Nota de Salud y Fármacos. Un artículo publicado el 20 de enero por React (https://www.reactgroup.org/news-and-views/news-and-opinions/year-2022/antibiotic-resistance-claims-more-than-1-2-million-lives-a-year-says-new-large-study/) añade los siguientes detalles:
Muertes atribuibles a la resistencia antibiótica
Principales enfermedades que causan muertes por resistencia a los antibióticos incluyen:
El Lancet también publicó una editorial sugiriendo que el Fondo Global debería incluir la resistencia antimicrobiana [1], y lo resumimos a continuación. La amenaza de la RAM se conoce desde hace tiempo. Los informes de la Comisión de Enfermedades Infecciosas de The Lancet sobre la resistencia a los antibióticos de 2013 y el informe O’Neill de 2016 han hecho recomendaciones que incluyen incrementar la concienciación pública, mejorar la vigilancia, mejorar los diagnósticos, hacer un uso más racional de los antibióticos, proporcionar acceso a agua potable y saneamiento, adoptar la iniciativa “Una sola salud” e invertir en nuevos antimicrobianos y vacunas.
Durante la última década ha habido algunas respuestas dignas de mención. En 2015, la OMS puso en marcha el Sistema Mundial de Vigilancia de la Resistencia a los Antimicrobianos y su Uso. También en 2015 se creó el Fondo Fleming (un programa que apoya a 24 países de África y Asia para hacer frente a la RAM); y en diciembre de 2021, los ministros de Finanzas del G7 emitieron declaraciones para apoyar el desarrollo de los antibióticos. Pero la acción ha sido episódica y desigual, lo que ha dado lugar a desigualdades globales en la RAM; y la innovación ha sido extremadamente lenta. Sólo se dispone de vacunas para uno de los seis principales patógenos descritos en el estudio. La reserva clínica de antibióticos es demasiado pequeña para hacer frente a la creciente aparición y propagación de la RAM.
Los líderes nacionales tienen ahora la obligación de hacer que la RAM ocupe un lugar más importante en sus agendas políticas. Hay que acelerar los esfuerzos de investigación para abordar las lagunas de conocimiento e innovación, y para informar sobre las políticas y las prácticas. Se debe garantizar el acceso a antibióticos eficaces. Por encima de todo, la RAM debe ser vista como un problema global, que necesita un plan coherente a nivel mundial, siguiendo la estrategia de “Una sola salud”.
Hay que aprovechar una oportunidad inmediata. A finales de este año, el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria celebrará su séptima reunión de reposición. Es probable que el foco de atención para invitar a los donantes a invertir se mantenga en las tres enfermedades en las que ha estado trabajando. Sin embargo, el Fondo está estudiando cómo ampliar su cometido en respuesta a un contexto mundial muy diferente, en particular, la necesidad de adoptar nuevas medidas para reforzar la preparación ante las pandemias y crear sistemas de salud resistentes en una época de crisis climática. En 2022 también se cumple el 20º aniversario de la creación del Fondo Mundial. Ahora es el momento adecuado para revisar su objetivo fundamental. El Fondo se creó para invertir en programas destinados a acabar con las enfermedades infecciosas que causan la mayor carga de enfermedad y muerte, especialmente en los países de ingresos bajos y medios. Ha demostrado ser un instrumento muy eficaz para proteger a las poblaciones susceptibles de padecer enfermedades prevenibles y tratables. La carga actual de la RAM y su amenaza futura deberían ser un estímulo urgente para revisar y ampliar la misión del Fondo Mundial. Ha llegado el momento de que el Fondo asuma la RAM como una de sus principales responsabilidades. Y los donantes deberían invertir generosamente en ese Fondo renovado y revigorizado.
Referencia