Comparado con otros antirretrovirales, la exposición del bebé en el útero al efavirenz supone un riesgo aproximadamente dos veces mayor de microcefalia (con anomalías del desarrollo neuropsicológico), así como de malformaciones en el desarrollo del tubo neural.
Los resultados de un estudio de cohorte realizado en EE UU, publicado a principios de 2020, han demostrado un vínculo entre la exposición de bebés en el útero que no han contraído VIH al efavirenz y la aparición de microcefalia, evaluada mediante la medición del perímetro cefálico después de los 6 meses de edad [1].
El doble de casos de microcefalia. Después de establecer una mediana de seguimiento de 5 años, se obtuvieron dos resultados: de los 3.055 que estuvieron expuestos al efavirenz, según los criterios menos rigurosos, 159 niños, es decir el 5,2%, tenía microcefalia; en cambio, con la aplicación de criterios más estrictos, 70 niños (2,3%) padecían esta malformación. Independientemente de los criterios utilizados, los niños de 1 y 5 años con microcefalia parecían sufrir anomalías en el desarrollo neuropsicológico y psicomotor con más frecuencia que aquellos que no tenían dicha enfermedad congénita. La mayor parte de las madres (93,5 %) habían tomado, al menos, dos medicamentos antirretrovirales durante el embarazo [1].
En función de los criterios utilizados para definir la microcefalia, y después de considerar una variedad de factores, la exposición al efavirenz en el útero se vinculó a un riesgo aproximadamente 2 —o 2,6— veces mayor de padecer microcefalia en contraste con otros fármacos antirretrovirales, al margen de qué trimestre de embarazó se esté atravesando (diferencias significativas en términos estadísticos). Este vínculo parecía menos visible cuando la exposición fue solo durante el primer trimestre. No se demostró relación alguna a dicha enfermedad con otros fármacos antirretrovirales [1, 2].
Anomalías congénitas del tubo neural. Existe incertidumbre con respecto a los efectos perjudiciales que tiene el efavirenz sobre el desarrollo intrauterino del sistema nervioso central. Ciertos estudios en animales expuestos al efavirenz en el útero, en dosis parecidas a las recomendadas para el tratamiento, han demostrado malformaciones del sistema nervioso central, entre ellas anencefalia, anoftalmía y microftalmía. Se han registrado alrededor de diez observaciones de anomalías congénitas de cierre del tubo neural (incluido el mielomeningocele) tras la exposición al efavirenz en el útero, aunque no se estableció una relación de causalidad. De acuerdo con los resúmenes de características del producto (SmPC, por sus siglas en inglés) en Europa y en EE UU, desde mediados de 2020, se debería evitar la administración del efavirenz durante el embarazo [2-5]. Los datos de un estudio de cohorte en Francia demostraron un aumento significativo desde el punto de vista estadístico en la incidencia de malformaciones del sistema nervioso central después de la exposición al efavirenz durante el primer trimestre [3, 6].
Desde mediados de 2020, los datos epidemiológicos no indican un aumento del riesgo con efavirenz; incluso luego de un metaanálisis de alrededor de veinte estudios epidemiológicos que abarcaban casi 1.300 niños expuestos a dicho fármaco en el útero, el cual tuvo como resultado que 38 niños del total tenían una anomalía congénita del tubo neural. Sin embargo, existe gran incertidumbre en torno a este resultado [2, 7, 8].
En la práctica. Durante el embarazo, el tratamiento antirretroviral es esencial para reducir la transmisión del VIH de la madre al bebé. Hay mucha incertidumbre respecto a los riesgos para el bebé de estos tratamientos. Efavirenz es un fármaco antirretroviral, que se ha documentado que tiene suficientes efectos perjudiciales sobre el desarrollo neuropsicológico para justificar la interrupción de su uso en mujeres que están, o podrían quedar, embarazadas [2]. Debido a su larga vida media de eliminación, a partir de mediados de 2020, el SmPC de Sustiva° en Europa y en EE UU menciona que no se debería dejar de usar métodos anticonceptivos adecuados hasta las 12 semanas después de la suspensión del efavirenz [4, 5].
Referencias seleccionadas de la búsqueda bibliográfica de Prescrire