Cinco meses después de que el CEO de Amgen, Bob Bradway, adquiriera Five Prime por US$1.900 millones y luego comprara Rodeo, una empresa más pequeña, ha vuelto a optar por comprar otra empresa de biotecnología.
Esta vez, Amgen pagará US$900 millones en efectivo y se compromete a pagar hasta US$1.600 millones cuando cumpla ciertos hitos, para acabar absorbiendo a Teneobio, una empresa privada que desarrolla anticuerpos y tiene experiencia con la producción de nuevos biespecíficos y multiespecíficos. Además, Amgen citó la “plataforma de activadores de células T” de Teneobio, que ampliará el liderazgo que tiene Amgen en el mercado de los activadores de células T biespecíficas, pues le aporta un acercamiento distinto pero complementario, a la plataforma BiTE de Amgen”.
Específicamente, con esta adquisición Amgen se adueña de un programa de Fase I para un fármaco denominado TNB-585, un activador de células T biespecíficas PSMA / CD3 que se está desarrollando para tratar el cáncer de próstata resistente a la castración. Amgen planea utilizarlo como terapia complementaria del acapatamab (antes AMG 160) y AMG 509.
El PSMA es uno de los grandes objetivos de biofarma, y Amgen ha destacado su interés en el programa AMG 160, y en la ESMO se presentó alguna evidencia temprana y positiva sobre su eficacia. También promovió una asociación de más de US$1.000 millones entre Merck y Janux, justo antes de la salida de Roger Pwerlmutter.
Amgen no suele hacer compras de nuevas empresas de biotecnología. Esta serie de acuerdos es un giro inusual para el cauteloso gigante farmacéutico, particularmente en un entorno en que los precios de los activos son elevados.
Teneobio hizo un mapa biotecnológico a principios de 2019, cuando AbbVie pagó por adelantado una considerable suma de US$90 millones para asociarse con un biespecífico preclínico de BCMA / CD3, otro medicamento popular en la lucha contra el cáncer. Y hace unas semanas, AbbVie acabo de comprar el programa. Evidentemente, Amgen piensa que el trabajo en Teneobio tiene mucho potencial.
“La plataforma de anticuerpos de Teneobio complementa nuestra capacidad existente y nos podría aportar un conjunto más diverso de componentes básicos que nos podrían ayudar a desarrollar nuevas terapias multiespecíficas”, señala el director de I + D de Amgen, David Reese. “Además, la disponibilidad de la tecnología engager CD3 de Teneobio nos permitirá ampliar nuestra capacidad para generar biespecíficos y, al tener nuestra propia tecnología, podremos personalizar el dominio de participación de las moléculas de las células T en función de la enfermedad y el objetivo”.