Fundación GEP presentó oposición a pedidos de patente que la farmacéutica estadounidense hizo en la Oficina de Patentes Argentina sobre el remdesivir, uno de los medicamentos que aparenta ser el más promisorio para tratar el coronavirus. GEP solicitó al Instituto Nacional de Propiedad Industrial que rechace la solicitud de patente de Gilead Sciences a los fines de eliminar barreras monopólicas que la empresa multinacional pretende generar en torno a esta droga que podría ser clave en el tratamiento de la pandemia.
Buenos Aires, 1 de junio de 2020. Fundación GEP presentó oposición a pedidos de patente que Gilead, la multinacional farmacéutica estadounidense, demanda sobre el medicamento remdesivir; uno de los medicamentos bajo ensayo clínico para tratar el Covid-19 que se muestra como el tratamiento más promisorio.
En nuestro país, la empresa presentó al menos seis pedidos de patente, con los que pretende apropiarse de la tecnología. En sus solicitudes al INPI intenta reivindicar métodos terapéuticos que no son patentables en Argentina. De ese modo, Gilead pretende obtener derechos exclusivos para producir y comercializar remdesivir a precios exorbitantes.
“Las oposiciones a las patentes, son instrumentos legales que permiten colaborar con el análisis de solicitudes de patentes que recibe el INPI, a quien corresponde otorgar o rechazar estos títulos de propiedad mediante la verificación de la legalidad de la solicitud. Previo al otorgamiento de una patente, el Estado Argentino, debe analizar las solicitudes así mismo como las oposiciones o llamados de atención de terceros como las que viene haciendo Fundación GEP”, expresó Lorena Di Giano Directora Ejecutiva de Fundación GEP.
Las patentes permiten que las empresas fijen a sus productos precios imposibles de comprar. En el caso de sofosbuvir -una droga para curar la Hepatitis C- Gilead fijó un precio de 84.000 dólares estadounidenses el tratamiento para una persona, por contar con patentes en algunos países. Mientras que la Universidad de Liverpool publicaba que este medicamento podría ser producido por 100 dólares.
“Claramente, Gilead está aplicando la misma estrategia comercial abusiva sobre remdesivir. Nuestro objetivo es evitar los comportamientos abusivos de Gilead en Argentina en el marco de la pandemia de COVID-19”, agregó Di Giano.
Todavía no se conoce el precio que Gilead pondrá a remdesivir y mucho va a depender de los monopolios que pueda obtener en los diferentes países. La Universidad de Liverpool realizó recientemente un estudio que demostró que remdesivir, como así mismo otros medicamentos que se ensayan para COVID-19, tendrían un costo de producción de 1 dólar o menos por día de tratamiento. Este dato es fundamental para analizar el carácter especulativo de los precios de Gilead.
Gilead ya mostró su estrategia comercial a nivel global sobre este medicamento. La empresa está dispuesta a ceder tecnología sólo a ciertos productores de India y Pakistán, y ha reservado el mercado en países de renta media -incluidos todos los países de Sudamérica- para hacer uso de los derechos de propiedad intelectual que le otorgan sus patentes.
Gilead es una de las corporaciones farmacéuticas transnacionales más grandes del mundo y está conformada por una sociedad de varios fondos de inversión, entre los que se destacan BlackRock, uno de los acreedores de la deuda externa argentina. La empresa, con sede en Estados Unidos, se especializa en la producción de antirretrovirales y medicamentos para la Hepatitis C y tiene el monopolio de producción y venta de remdesivir en 70 países del mundo, a pesar de que esa droga todavía no cuenta con aprobación para ser comercializada.
“Las empresas farmacéuticas ya no son laboratorios donde hay científicos buscando una solución: detrás hay grandes fondos de inversión que especulan con nuestra salud. No les interesa salvar vidas, desarrollan sus productos sólo para aquellas personas y Estados que los puedan comprar a precios monopólicos y extorsivos que imponen. Ya hemos sido testigos, recientemente de cómo esta corporación farmacéutica bloquea el acceso a medicamentos que salvan vidas. Debemos frenar la captura corporativa y el abuso que las farmacéuticas transnacionales hacen sobre nuestra Salud, sostuvo José María Di Bello, Presidente de Fundación GEP.
El INPI debe actuar con urgencia y resolver por prioridad todos los pedidos de patentes sobre remdesivir o cualquier otra droga o vacuna que demuestre ser efectiva en la respuesta a la pandemia.
En Argentina tenemos disponibles las herramientas legales necesarias para garantizar el acceso a medicamentos esenciales o vacunas para el COVID-19, es fundamental la voluntad política.