Tras meses de deliberación, la Comisión Federal de Comercio (o FTC) aprobó, por 3 votos contra 2, que AbbVie adquiera a Allergan por US$63.000 millones, convirtiéndose así en la cuarta corporación farmacéutica. La FTC dijo que al solicitar que Allergan dejara de invertir en tres productos se solucionaban todas las preocupaciones relacionadas con la competencia. Uno de los comisionados, Rohit Chopra, discrepó fuertemente en un documento de disensión de 20 páginas.
Public Citizen, que en abril había solicitado que se interrumpieran las fusiones y adquisiciones durante la pandemia emitió un comunicado diciendo que la FTC, al permitir la fusión de dos empresas conocidas por haber manipulado los precios ha vuelto a fallar a los consumidores. Recordó las prácticas anticompetitivas de Allergan y su papel en la promoción de los opioides [1] y cómo AbbVie ha manipulado las patentes de Humira, su medicamento de grandes ventas.
Public Citizen teme que esta nueva corporación siga utilizando prácticas anticompetitivas. Allergan trató de aprovechar la inmunidad soberana de la tribu Mohawk para ampliar sus patentes e inundar el país con opioides, y la Comisión Federal de Comercio le ha tenido que llamar la atención más de una docena de veces [2]
Según Ed Silverman [3] el acuerdo, que se anunció hace casi un año, se produjo cuando ambas compañías trataban de convencer a los inversionistas de sus planes de crecimiento a largo plazo. AbbVie sintió presión porque a partir de 2023 saldrán al mercado los genéricos de Humira; y Allergan ha tenido que enfrentar la competencia de nuevos rivales para sus medicamentos más vendidos, especialmente Botox.
Silverman [3] destaca que, desde el principio, hubo objeciones a esta fusión. Un grupo de legisladores se quejó de que el constante aumento de fusiones farmacéuticas estaba contribuyendo al aumento de los precios de los medicamentos de venta con receta. Y una coalición de grupos de consumidores y sindicatos instó a la FTC a bloquear el acuerdo, argumentando que la fusión reprimiría la competencia y señalando que ambas compañías han adoptado comportamientos “anticompetitivos” en el pasado.
Preocupa que la compañía que resulte de la fusión llegue a acuerdos con los administradores de beneficios de farmacia para que les permitan incluir sus productos en los formularios de las compañías de seguros, y al ofrecer altos descuentos por sus medicamentos logren evitar que sus rivales obtengan una ubicación favorable [3].
Las FTC solicitó que, para aliviar la preocupación por mantener la competencia en el mercado, Allergan retire su inversión en AstraZeneca para un medicamento experimental llamado brazikumab, un inhibidor de IL-23, para tratar la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. AbbVie ha comercializado en EE UU un medicamento de este tipo, llamado Skyrizi para combatir la psoriasis en placas, que también se está probando para tratar la colitis ulcerosa y de Crohn. Allergan también venderá a Nestlé otros dos medicamentos, Zenpep y Viokace, que tratan la insuficiencia pancreática exocrina, o EPI. En este momento, solo cuatro compañías venden tratamientos EPI, pero AbbVie y Allergan controlan el 95% del mercado de dichos medicamentos [3].
El Comisionado Chopra dijo que “Exigir que las partes fusionadas se deshagan de los medicamentos que tiene los mismos efectos es una estrategia estrecha, defectuosa e ineficaz. Se pierde el panorama general, lo que permite a las compañías farmacéuticas explotar aún más su dominio, bloquear a los nuevos participantes y dañar a los pacientes que necesitan medicamentos que salvan vidas” y argumentó que Nestlé no es el comprador adecuado para los dos medicamentos EPI. Porque Nestlé no es una compañía farmacéutica, sino que se enfoca en alimentos, bebidas y otros artículos de abarrotes, “su capacidad no es comparable con la capacidad de Allergan” y tiene un “historia de altibajos” en sus últimos intentos de entrar en el mercado de los productos farmacéuticos [3].
“La desinversión de activos es un remedio apropiado solo si el comprador reemplaza completamente la competencia que ha perdido en la fusión. Pero, las partes que se fusionan tienen pocos incentivos para vender a un competidor fuerte y, de hecho, tienen más éxito cuando el comprador fracasa. Los nuevos participantes enfrentan grandes obstáculos incluso con compradores bien capitalizados” explicó Chopra. “Si Nestlé fracasa en este nuevo intento de producir productos farmacéuticos, no sentirá un impacto significativo en sus finanzas”.
En cuanto a la transacción con AstraZeneca, señaló que no es una venta, sino la devolución de un activo y una “ganancia inesperada”, ya que el dinero no está cambiando de manos. También preocupa que AstraZeneca podría no tener las habilidades para competir en este mercado en particular, lo que plantea dudas sobre su compromiso a largo plazo para competir con AbbVie [3].
Chopra concluyó argumentando que la FTC debería tomar “medidas concretas para avanzar desde esta desafortunada decisión y su preocupante resultado “. Entre sus sugerencias: mejorar su enfoque para analizar fusiones donde las nuevas empresas impulsen la innovación; mejorar el proceso para evaluar las desinversiones mediante la inclusión de personal con experiencia financiera y técnica; coordinar y cooperar con los procuradores generales del estado en investigaciones de fusiones; y proporcionar una mayor transparencia sobre las revisiones de fusiones [3].
Los comisionados que apoyaron el acuerdo no estuvieran de acuerdo con Chopra y escribieron que su análisis “se basa en afirmaciones falsas, la aplicación incorrecta de la ley y lógica engañosa. Parece haber aceptado completamente el adagio de nunca dejar que la verdad se interponga en el camino de una buena historia” y especula, al tiempo que critica los pronósticos basados en investigaciones rigurosas y fundamentadas en evidencia [3].
“Cualquier afirmación de que la comisión no consideró todas las teorías o impactos plausibles procesables bajo las leyes antimonopolio es incorrecta …. Dicho esto, continuaremos apoyando el examen autocrítico que tipifica el enfoque de la agencia” [3].
Referencias