El Covid-19 causa una crisis sanitaria y económica sin precedentes. Aunque ha dejado a muchos sectores de la economía paralizados y se prevé una recuperación que podría tardar décadas, también la pandemia impulsa a nuevos multimillonarios.
Además, la crisis puso en primera línea a la industria farmacéutica y biotecnológica; así como a los investigadores y médicos. Estos luchan por encontrar una solución para frenar la propagación del virus y aliviar la enfermedad.
Incluso las inversiones contra el virus se han hecho asumiendo un gran riesgo —aunque con un gran apoyo de organismos públicos y organizaciones sin ánimo de lucro— y no todos han salido ganando.
Por ejemplo, GSK, Sanofi y MSD encontraron más obstáculos que beneficios en su carrera por desarrollar una vacuna contra el virus (https://www.businessinsider.es/estas-farmaceuticas-no-han-logrado-vacuna-covid-19-812359).
Sin embargo, algunas apuestas sí acabaron como una mina de oro para los que asumieron los riesgos. Estos son los empresarios que hacen fortuna con su lucha contra la pandemia y se han convertido en millonarios.
Stephane Bancel, CEO de Moderna, cuenta ahora con una fortuna de 4,300 millones de dólares (mdd), según Forbes (https://www.forbes.com/sites/giacomotognini/2020/12/23/meet-the-50-doctors-scientists-and-healthcare-entrepreneurs-who-became-pandemic-billionaires-in-2020/?sh=17bfcc415cd9).
Bancel, de origen francés, dirige la biotecnológica que realizó primero los ensayos clínicos en humanos de una vacuna contra el coronavirus.
El director general se incorporó a la empresa en 2011. Anteriormente, fue director general de la empresa francesa de diagnóstico BioMérieux.
Moderna llevaba 10 años intentando desarrollar la prometedora tecnología de ARN mensajero para crear terapias pioneras. En 2019, la compañía terminó el año con una pérdida neta de 514 mdd.
Sin embargo, el financiamiento y el apoyo que recibió para impulsar la tecnología en plena crisis sanitaria permitió que la biotecnológica desplegara todo su potencial.
El propio Bancel reconoció ante Financial Times que la financiación durante esta pandemia ha «acelerado la entrada en el mercado comercial en tres o cuatro años».
Ahora, la compañía está actualmente valorada en 67,900 mdd. Las estimaciones señalan que, solo este año (https://www.businessinsider.es/moderna-espera-ingresos-184-millones-dolares-818589), espera ingresar 18,400 mdd gracias a las ventas de su vacuna contra el Covid-19.
También, el éxito de Moderna creó un nuevo millonario, Timothy Springer, un inmunólogo y profesor de Harvard que invirtió en la compañía en sus primeras etapas y cuya participación del 3.5% tiene ahora un valor aproximado de 1,600 mdd.
Con una fortuna de 4,000 mdd, Ugur Sahin, director general y cofundador de BioNTech, es otro de los ganadores de la pandemia gracias a la vacuna contra el coronavirus que desarrolló y distribuye con Pfizer.
Cuando se anunció la alianza con el gigante farmacéutico, Sahin se convirtió en multimillonario tras dispararse en bolsa las acciones de BioNTech.
Lo mismo ocurrió con la doctora Özlem Türeci, que ocupa el cargo de directora médica y que cofundó la compañía junto a Sahin.
La vacuna fue la primera en obtener autorización por los organismos reguladores y va camino de ser la apuesta favorita de los gobiernos para frenar la pandemia.
Pfizer, que estimó inicialmente que obtendría unos 2 mdd con su vacuna, termina subiendo las estimaciones a 15,000 mdd.
La fortuna de Carl Hansen, director general de AbCellera, asciende a 2,900 mdd tras la salida a bolsa de la compañía en diciembre de 2020.
Además, Hansen es el cofundador de AbCellera. Esta empresa de biotecnología utiliza la inteligencia artificial y el machine learning para identificar los tratamientos de anticuerpos más prometedores para las enfermedades.
Aunque Hansen fundó la empresa en 2012, pasó a centrarse a tiempo completo en AbCellera en 2019. El CEO tiene una participación de 23% de la compañía; esta dio sus frutos con la salida a bolsa de la compañía y que despegó durante la crisis sanitaria.
La clave del éxito de la compañía durante la pandemia es su capacidad para identificar 500 secuencias de anticuerpos contra el SARS-CoV-2, el virus que causa el Covid-19.
Gracias a ello estableció un acuerdo de colaboración con el gigante farmacéutico Eli Lilly para desarrollar un tratamiento de anticuerpos contra el virus conocido como bamlanivimab.
La terapia recibió en noviembre la autorización de la FDA para su uso de emergencia.
Por su parte, el español Juan López-Belmonte se estrenó este año en la 35ª lista anual de Forbes de «Los más ricos del mundo» y cuenta ahora con una fortuna de 1,800 mdd.
López-Belmonte López preside la empresa farmacéutica española Rovi, que firmó un contrato con Moderna en julio para llenar y envasar cientos de millones de dosis de su vacuna.
«Como parte del acuerdo, Rovi proporcionará capacidad de llenado y acabado de viales mediante la adquisición de una nueva línea de producción y equipos para la formulación, el llenado, la inspección visual automática y el etiquetado para dar soporte a la producción de cientos de millones de dosis de la vacuna candidata prevista, en principio, para abastecer mercados fuera de Estados Unidos a partir de principios de 2021», detalló la compañía en un comunicado (https://www.businessinsider.es/vacuna-moderna-terminara-fabricacion-madrid-674727).
En la primera semana tras la noticia, la compañía se disparó 7% en la Bolsa, donde cotiza desde 2007, según recoge El Español.
Sarah Gilbert, cofundadora de Vaccitech
Con cifras mucho más modestas, la próxima en ver beneficios millonarios (aunque sin unirse, todavía, al club de los multimillonarios), podría ser Sarah Gilbert.
La investigadora de la Universidad de Oxford —que dirige la investigación de la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus—, podría ganar 20 mdd con la salida a bolsa de su startup de vacunas.
A finales de este año, la biotecnológica Vaccitech saldrá a bolsa y Gilbert tiene millones de dólares en acciones de la compañía.
La investigadora, como ella misma explica, fundó la startup junto con el profesor Andrew Hill como una spin-off de la Universidad de Oxford. Está centrada en desarrollar nuevas vacunas utilizando los vectores virales no replicantes que desarrolla el grupo.
Uno de ellos es el que se utilizó en el desarrollo de la vacuna contra el coronavirus; para la que colaboró con la farmacéutica AstraZeneca.
En un primer momento, los derechos para desarrollar y fabricar la vacuna eran propiedad de Vaccitech. Hill y Gilbert abandonaron la empresa para centrarse en la investigación; pero poseen cada uno más de 5% de la empresa.
La compañía recaudó 168 mdd a principios de este año en una ronda que situaría su valoración en 450 mdd.