Una gran cantidad de evidencia reciente sugiere que el café es beneficioso para la salud. Pero esta bebida popular puede no ser segura para todos. Si está tomando ciertos medicamentos, tenga cuidado: algunos de ellos pueden tener efectos secundarios desastrosos cuando se consumen con café y otras formas de cafeína.
Aquí hay ocho medicamentos que interactúan con el café, y describimos las posibles consecuencias de ingerir ambos de manera conjunta.
Efedrina
La efedrina es un estimulante que acelera el sistema nervioso. Se incluye en descongestionantes y como broncodilatador para tratar problemas respiratorios. También se usa para tratar la presión arterial baja, la narcolepsia, los problemas menstruales y otros.
Debido a que la cafeína que hay en el café también es un estimulante, combinar efedrina con café puede ser muy riesgoso. Los expertos en salud de la Clínica Mayo desaconsejan mezclarlos, porque el consumo de ambos puede producir presión arterial alta, ataques cardíacos, derrames cerebrales o convulsiones.
Antidiabéticos
Los antidiabéticos que interaccionan con el café incluyen a la glimepirida (vendida como Amaryl), gliburida (DiaBeta, Glynase PresTab y Micronase), insulina, pioglitazona (Actos), rosiglitazona (Avandia) y muchos otros, según un artículo en RXList.com (https://www.rxlist.com/coffee/supplements.htm) .
En algunas personas, el café puede aumentar el azúcar en sangre, lo que probablemente contrarreste los efectos de los antidiabéticos. A los pacientes diabéticos a los que les gusta tomar café se les debe controlar cuidadosamente el nivel de azúcar en sangre y es posible que sea necesario modificar la dosis de sus medicamentos para tener en cuenta estos efectos.
Teofilina
La teofilina (que se vende con los nombres Theo 24, Theochron, Uniphyl y otros) se usa para tratar el asma, la bronquitis, el enfisema y otras enfermedades que se acompañan de dificultad para respirar y sibilancias. El fármaco es una xantina, que actúa relajando los músculos, abriendo las vías respiratorias y mejorando la respuesta de los pulmones a los irritantes.
La cafeína que hay en el café tiene un impacto en el cuerpo similar al de la teofilina, lo que significa que es probable que la combinación de los dos aumente los efectos del fármaco, así como sus efectos secundarios, que incluyen náuseas y palpitaciones cardíacas, según la Clínica Mayo. El café también puede reducir la velocidad con la que el cuerpo elimina la teofilina, lo que requiere cambios en la dosis.
Fenotiazinas
Las fenotiazinas son un grupo de medicamentos que se utilizan para tratar trastornos mentales como la esquizofrenia y otras formas de psicosis. Estos incluyen a la flufenazina (Permitil y Prolixin), clorpromazina (Thorazine), haloperidol (Haldol), proclorperazina (Compazine) y muchos otros. Las fenotiazinas también se pueden usar para mitigar la agitación en algunos pacientes, como aquellos que tienen náuseas severas o que experimentan dolor de moderado a intenso.
Los taninos presentes en el café pueden unirse a estos medicamentos y evitar que el cuerpo los absorba con la misma eficacia. Esta interacción solo ocurrirá si el café se consume dentro de 1 a 2 horas después de tomar el medicamento, pero aun así se justifica un control cuidadoso en estos pacientes.
Anticoagulantes
Estos medicamentos se utilizan para retardar la coagulación de la sangre e incluyen a la aspirina, clopidogrel (Plavix), ibuprofeno (Advil, Motrin y otros), naproxeno (Anaprox, Naprosyn y otros), enoxaparina (Lovenox) y más.
Los expertos en salud recomiendan precaución al combinarlos con café, que también puede retardar la coagulación de la sangre. Mezclar estos medicamentos con cafeína puede aumentar las posibilidades de sangrado excesivo y hematomas, señala RXList.com.
Antidepresivos tricíclicos
Estos medicamentos para la depresión incluyen amitriptilina (Elavil) e imipramina (Tofranil, Janimine). Funcionan aumentando los niveles de los neurotransmisores norepinefrina y serotonina e inhibiendo el neurotransmisor acetilcolina, los investigadores creen que esto puede restablecer el equilibrio de las sustancias químicas en el cerebro y ayudar a aliviar los síntomas de la depresión.
Sin embargo, una vez más, los taninos del café pueden interferir con este proceso al unirse a los medicamentos y limitar la cantidad que el cuerpo puede absorber. Los expertos en salud recomiendan evitar el café entre 1 y 2 horas después de tomar antidepresivos tricíclicos para garantizar su eficacia.
Antiasmáticos
Los agonistas beta-adrenérgicos se utilizan para tratar el asma e incluyen albuterol (Proventil, Ventolin y Volmax), metaproterenol (Alupent), isoproterenol (vendido como Isuprel) y otros. Actúan relajando los músculos alrededor de las vías respiratorias y pueden causar efectos secundarios que incluyen ansiedad, temblores, palpitaciones o aumento del ritmo cardíaco.
El consumo simultáneo de café y de agonistas beta-adrenérgicos puede provocar o empeorar los efectos secundarios antes mencionados.
Anticonceptivos
Los ejemplos de medicamentos anticonceptivos incluyen etinilestradiol y levonorgestrel, noretindrona y otros.
Las píldoras anticonceptivas pueden evitar que el cuerpo metabolice la cafeína tan rápido como lo haría normalmente. Como resultado, tomar píldoras anticonceptivas con café puede provocar nerviosismo, dolores de cabeza, ritmo cardíaco acelerado y otros efectos secundarios.
Además de lo anterior, el café también puede interactuar con los suplementos vitamínicos.
Siempre que no interactúe con otros medicamentos ni le cause otros problemas de salud, el café, con moderación, también tiene sus beneficios. Algunos estudios lo relacionan con un mejor rendimiento cognitivo, la capacidad para quemar grasa, recuperación después del ejercicio e incluso un menor riesgo de enfermedades de Parkinson y Alzheimer. Un estudio reciente incluso sugiere que el café puede reducir el riesgo de enfermedad hepática crónica.