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Reacciones Adversas e Interacciones

Inmunoestimulantes inhibidores de los puntos de control inmunitarios: necrólisis epidérmica tóxica y síndrome de Stevens-Johnson

Rev Prescrire 2022; 31 (234): 47
Traducido por Salud y Fármacos, publicado en Boletín Fármacos: Farmacovigilancia 2022; 25(3)

Tags: nivolumab, pembrolizumab y cemiplimab, atezolizumab, avelumab, durvalumab, ipilimumab, tremelimumab, necrólisis epidérmica, Stevens-Johnson

En 2021, un equipo de China publicó una revisión sistemática con metaanálisis que evaluó el riesgo de necrólisis epidérmica tóxica y síndrome de Stevens-Johnson relacionado con inmunoestimulantes inhibidores de los puntos de control inmunitarios que se usan para tratar muchos cánceres. Esta revisión incluyó 20 ensayos clínicos aleatorizados (publicados o sin publicar) que se realizaron con pacientes que padecían diferentes tipos de cáncer. Los medicamentos estudiados fueron: inmunoestimulantes anti-PD-1 dirigidos al receptor PD-1 (muerte programada tipo 1) — nivolumab, pembrolizumab y cemiplimab—;inmunoestimulantes anti-PD-L1 dirigidos al ligando del receptor PD-1 — atezolizumab, avelumab y durvalumab—; e inmunoestimulantes dirigidos al antígeno CTLA-4 — ipilimumab and tremelimumab—. La duración del seguimiento en estos ensayos clínicos fue de entre 9 meses y 5 años [1,2].

La necrólisis epidérmica tóxica o síndrome de Stevens-Johnson ocurrió en 22 de los 6.638 pacientes que recibieron uno de estos inmunoestimulantes, frente a 2 de los 4.959 controles que no habían sido expuestos a estos medicamentos, es decir, un riesgo relativo estimado de 4,3 con un intervalo de confianza de 95% (IC95) de 1,9 a 9,9. Este incremento del riesgo fue de igual magnitud con los diferentes inhibidores de los puntos de control (la comparación se basó tanto en los datos publicados como en los no publicados).

Los autores también analizaron 411 informes de necrólisis epidérmica tóxica o síndrome de Stevens-Johnson atribuidos a un inhibidor de los puntos de control inmunitarios que se recabaron en la base de datos de farmacovigilancia de EE UU entre 2011 y 2020. 50% de los casos ocurrieron durante los primeros 25 días de la exposición y, en aproximadamente 80% de los casos, dentro de los primeros 2 meses de exposición. La mortalidad en los pacientes con el síndrome de Stevens-Johnson fue de 20%, y en los pacientes con necrólisis epidérmica tóxica fue de 61% [2].

En la práctica, cuando ocurren estos efectos adversos graves, el factor principal que determina el pronóstico es la interrupción rápida del medicamento responsable. Se debería advertir a los pacientes tratados con un inhibidor de los puntos de control inmunitarios sobre las señales que apuntan al comienzo de la necrólisis epidérmica tóxica o el síndrome de Stevens-Johnson, que debería llevarlos a buscar atención médica sin demora, sobre todo durante los primeros dos meses del tratamiento. Las señales son: sensación de ardor en los ojos, dolor de garganta y dolor en la boca o la vagina [3].

Referencias

  1. Prescrire Rédaction “Anti-PCD-1 et anti-PCD-L1: nivolumab, etc.” Interactions Médicamenteuses Prescrire 2021.
  2. Zhu J et al. “Stevens-Johnson syndrome/toxic epidermal necrolysis in patients treated with immune checkpoint inhibitors: A safety analysis of clinical trials and FDA pharmacovigilance database” EClinicalMedicine 2021; 37: 10 pages.
  3. Prescrire Rédaction “Fiche E3c. Syndromes de Lyell et de Stevens-Johnson médicamenteux” Interactions Médicamenteuses Prescrire 2022.
creado el 12 de Septiembre de 2022