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Publicidad y Promoción

Suben la temperatura del mercado de los sofocos con medicamentos innecesarios y posiblemente peligrosos

(Heating up the hot flash market with unnecessary, and potentially harmful, drugs)
Patricia Bencivenga y Adriane Fugh-Berman
The Baltimore Sun, 17 de mayo de 2023
https://www.baltimoresun.com/opinion/op-ed/bs-ed-op-astellas-hot-flash-market-20230517-a52ukpzx2jfzlm7nbx3dgbi6l4-story.html
Traducido por Salud y Fármacos, publicado en Boletín Fármacos: Ética y Derecho 2023; 26(3)

Tags: menopausia, fezolinetant, Veozah, sofocos de la menopausia, crear conciencia de enfermedad, Astellas Pharma, Heat on the Street, Know VMS, síndrome vasomotor

La FDA acaba de aprobar el fezolinetant (Veozah) para tratar los sofocos de moderados a graves asociados a la menopausia. Estos sofocos y sudores nocturnos son lo que los médicos llaman síntomas vasomotores, un término que se acortó a SVM y que Astellas Pharma reinventó como parte de su campaña de prelanzamiento. Tiene como objetivo “educar” a los consumidores y a los profesionales de la salud sobre los SVM, y resucitar mitos del siglo XX sobre la menopausia.

Su anuncio del Super Bowl (Nota de SyF: el evento deportivo de mayor audiencia en EE UU) —presentado antes de obtener la aprobación de la FDA— llegó, según se estima, a 17 millones de mujeres de entre 35 y 64 años. En el anuncio sobre los SVM no se menciona al fezolinetant porque es ilegal promocionar un medicamento antes de que haya sido autorizado. No obstante, la promoción de una enfermedad —o un síntoma presentado como una enfermedad— no es ilegal.

El anuncio “Heat on the Street” [El calor en las calles] anima al público a ingresar en WhatsVMS.com, un sitio patrocinado por Astellas que contiene muchos recursos, testimonios personales y cuestionarios de síntomas. Las farmacéuticas usan estos cuestionarios autoadministrados con frecuencia, como una poderosa herramienta publicitaria. Según nuestra experiencia, todos estos cuestionarios financiados por farmacéuticas están diseñados para arrojar resultados negativos a la mayoría de los que los responden, y este no es una excepción. Incluso si responde con un “no” a cada pregunta sobre los síntomas del SVM del cuestionario, igualmente se le recordará que debe consultar a su médico si en algún momento “empieza a sentir el calor”.

Del otro lado de la ecuación, Astellas preparó a los médicos con información sobre los SVM. La empresa financió un módulo de educación médica continua para profesionales de la salud, para que aprendieran más sobre el manejo de los SVM. Uno de los profesores de esta actividad es miembro del comité asesor de Astellas. El módulo menciona que, en la actualidad, se están desarrollando opciones farmacéuticas para manejar los sofocos. Además de la beca educativa para la formación continuada, el sitio web de Astellas orientado a los profesionales de la salud, KnowVMS.com, explica que los SVM ocurren debido a “señales de neuroquinina B (NKB) sin oposición”. De hecho, la causa de los sofocos no se conoce con exactitud, pero el extracto se tomó de una publicidad que presenta al fezolinetant como un antagonista de neuroquinina. El sitio anima a los profesionales de la salud a solicitar información y dejar sus datos para hablar con un representante de Astellas.

Hasta ahora, la publicidad del fezolinetant es un ejemplo clásico de la publicidad para reconocer las enfermedades, que vincula una enfermedad especifica con un medicamento específico. Si existe un solo medicamento para tratar lo que la industria considera una “enfermedad” no es necesario publicitar el medicamento: basta con publicitar el trastorno. La FDA, que al parecer desconoce incluso los conceptos comerciales más básicos, no logra regular las campañas de concienciación de enfermedades que se usan como publicidad. Entonces, las farmacéuticas pueden simplemente declarar que un síntoma es una enfermedad, lanzar una campaña de concienciación sobre el problema y evadir las leyes que tienen la finalidad de impedir que se publiciten medicamentos que aún no han sido aprobados.

Los únicos dos síntomas cuya asociación con la menopausia está comprobada son los sofocos y la sequedad vaginal. Los tratamientos con estrógenos pueden aliviar ambos; el fezolinetant trata solo los sofocos. Y, aunque muchas mujeres perimenopáusicas experimentarán algunos sofocos, el Study of Women’s Health Across the Nation (SWAN) [Estudio sobre la salud de las mujeres en toda la nación], que incluyó a 2.784 mujeres de entre 42 y 52 años, mostró que el 59,8% de las mujeres no experimentaban sofocos al inicio; el 44,5% de las mujeres no experimentaron sofocos durante el período de cinco años. Al inicio, solo el 11,4% notificaron seis días o más con sofocos, que aumentaron a 21,2% durante el período de cinco años. Si bien muchas mujeres posmenopáusicas y perimenopáusicas experimentan síntomas vasomotores, por lo general no son problemáticos. Un estudio internacional que incluyó a 3.460 mujeres posmenopáusicas de entre 40 y 65 años descubrió que el porcentaje de mujeres que experimentaban sofocos de moderados a graves era del 40% entre las europeas, del 34% entre las estadounidenses y del 16% entre las japonesas.

Los sofocos pueden prolongarse durante meses, años o, en algunos casos, décadas. Es verdad que los síntomas molestos deberían recibir atención, pero también se debe proporcionar información exacta a las pacientes sobre los tratamientos que se les ofrecen. Los tratamientos hormonales para la menopausia tienen una eficacia probada para aliviar los sofocos, pero también aumentan el riesgo de cáncer de mama, ictus, embolia pulmonar, cáncer de ovario, cálculos biliares y otras complicaciones graves. Puede que el fezolinetant no tenga el mismo perfil de efectos adversos que la terapia hormonal, pero tampoco parece tener eficacia para controlar los sofocos ni aporta ningún beneficio para la sequedad vaginal.

El fezolinetant puede ser un poco mejor que un placebo. El Instituto de Revisión Clínica y Económica (ICER, por sus siglas en inglés), una organización independiente que evalúa la eficacia y los precios de los tratamientos nuevos, asegura que existen incógnitas significativas sobre la eficacia a largo plazo del fezolinetant. El ICER clasificó la evidencia del beneficio neto que el medicamento proporcionaría a largo plazo como “prometedora, pero no concluyente”.

Además de que no es muy eficaz, en los ensayos clínicos el fezolinetant provocó aumentos preocupantes de enzimas hepáticas en las participantes. Cabe destacar que ya existen algunas alternativas a los tratamientos hormonales para los sofocos, que incluyen a los inhibidores de la recaptación de la serotonina y a la gabapentina. Parece que Astellas está exagerando la prevalencia y la gravedad de los sofocos con la esperanza de adjudicarse una pequeña posición en un mercado enorme, usando un medicamento que, como mucho, ofrece únicamente un beneficio modesto.

creado el 14 de Septiembre de 2023