Resumen
Antecedentes. Estudiamos la asociación entre el consumo de cannabis y la salud cardiovascular en la población general, entre los no fumadores y entre los individuos más jóvenes.
Métodos y resultados. Se trata de un estudio poblacional transversal de datos recogidos entre 2016 y 2020 a través de la Encuesta de Vigilancia de Factores de Riesgo Conductuales (Behavioral Risk Factor Surveillance Survey) que se realiza en 27 estados y 2 territorios estadounidenses. Evaluamos la asociación del consumo de cannabis (número de días de consumo de cannabis en los últimos 30 días) con los resultados cardiovasculares autoinformados (enfermedad coronaria, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y una medida compuesta de esos tres) en modelos de regresión multivariable, ajustando por consumo de tabaco y otras características, en la población adulta de 18 a 74 años.
Se repitió este análisis para solo a los no fumadores, para los hombres <55 años y para las mujeres <65 años con riesgo de enfermedad cardiovascular prematura. Entre los 434.104 encuestados, la prevalencia de consumo diario y no diario de cannabis fue del 4% y el 7,1%, respectivamente. La odds ratio ajustada (aOR) para la asociación del consumo diario de cannabis y cardiopatía coronaria, infarto de miocardio, ictus y el resultado compuesto (cardiopatía coronaria, infarto de miocardio e ictus) fue de 1. 16 (IC 95%, 0,98-1,38), 1,25 (IC 95%, 1,07-1,46), 1,42 (IC 95%, 1,20-1,68) y 1,28 (IC 95%, 1,13-1,44), respectivamente, con logaritmo de odds (log odds) proporcionalmente menores para los días de consumo entre 0 y 30 días al mes.
Entre los no fumadores, el consumo diario de cannabis también se asoció con el infarto de miocardio (aOR, 1,49 [IC 95%, 1,03-2,15]), el ictus (aOR, 2,16 [IC 95%, 1,43-3,25]) y la combinación de cardiopatía coronaria, infarto de miocardio e ictus (aOR, 1,77 [IC 95%, 1,31-2,40]). Las relaciones entre el consumo de cannabis y los resultados cardiovasculares fueron similares para los hombres <55 años y las mujeres <65 años.
Conclusiones. El consumo de cannabis se asocia a resultados cardiovasculares adversos, y un consumo más intenso (más días al mes) se asocia a una mayor probabilidad de eventos adversos.