Precios
EE UU. El enigma de los NIH: ¿contribuirán a que bajen los precios de los medicamentos innovadores?
Editado por Salud y Fármacos a partir de:
Leonard K
Can the government already control drug prices? US News, 11 de enero de 2016. Accesible en:
http://www.usnews.com/news/articles/2016/01/11/congressional-democrats-urge-nih-to-act-on-drug-prices
Los “Representantes del Congreso instan a los NIHs para que permitan la competencia de genéricos en el caso de los medicamentos de alto precio que se desarrollan con fondos públicos”, los National Institutes of Health (NIH o INS) tienen una provisión que permite que los inventos que se descubren con sus fondos puedan comercializarse sin patentes. En la carta que 50 diputados de la Cámara Federal, bajo el liderazgo del representante Lloyd Doggett de Austin, Texas, han escrito al director de los INS pidieron, pero no exigieron, que se use la flexibilidad que permite la legislación.
“El establecimiento de directivas fuertes protege a los consumidores… Una orientación adecuada, llevará a las compañías farmacéuticas a determinar los precios de los medicamentos al tener más información…”, explica la carta.
Lo que no está claro es si la carta tendrá algún impacto. Los INS, los mayores financiadores de la investigación médica del país, ya han decidido cinco veces en el pasado que el control de precios de los medicamentos es algo que corresponde al Congreso, y no a ellos.
Por las negativas anteriores, en esta última carta los congresistas escribieron: “Sin duda, la histórica falta de acción, ha enviado a las empresas farmacéuticas la señal desafortunada de que los precios de los inventos que se han descubierto utilizando fondos federales se pueden ajustar a lo que se presume que un enfermo o un ciudadano que se está muriendo están dispuestos a pagar”.
De acuerdo con una encuesta de la Fundación de la Familia Kaiser, el 77% de los estadounidenses afirman que el aumento de los precios de los medicamentos es su principal preocupación de salud.
Al mismo tiempo, la industria farmacéutica es uno de los grupos de cabildeo más poderosos en Washington y se opone a que el gobierno intervenga en determinar el precio de los medicamentos. Su argumento es que las decisiones serían arbitrarias y frenarían la innovación. Advierten que si no participan las empresas farmacéuticas innovadoras la mayoría de los medicamentos desarrollados con fondos de los INS nunca llegarán al mercado, y es difícil que las empresas recuperen las inversiones que hacen en la investigación de medicamentos que nunca llegan al mercado.
La Organización de la Industria Biotecnológica (BIO), un grupo comercial de la industria, dijo que estaba decepcionada con la propuesta del lunes, y agregó que en lugar de ayudar a los pacientes una “política intervencionista del gobierno” podría interrumpir la innovación.
“Obligar a los INS a que promulguen directivas para controlar los precios de los medicamentos permitiendo la competencia de genéricos requeriría que los INS desviaran recursos para algo que no están capacitados y también crearía una tremenda incertidumbre en el proceso de transferencia de tecnología “, dijo Jeanne Haggerty, Vicepresidente senior de BIO para las relaciones con el gobierno federal. “Esto desalentaría significativamente la inversión privada que complementa los inventos financiados con fondo federales. Menos inventos públicos llegarían a comercializarse”.
Los 50 congresistas demócratas no están de acuerdo con esta interpretación de la industria. En la carta dejaron claro que la legislación que permite a los INS que sus inventos se comercialicen sin patentes no amenazaría la innovación, ya que solo se utilizaría cuando se producen abusos.
Lo mismo piensa el Centro para el Progreso Americano, un grupo con tendencia de izquierda. En un comunicado elogió la carta, señalando que se han desarrollado muchos fármacos a través de la investigación de los NIH, que en definitiva los financian los contribuyentes. “Si una compañía farmacéutica se aprovecha de los fondos que han aportado los contribuyentes, estos no deberían pagar dos veces, – una vez para la investigación y la segunda pagando un alto precio por medicamentos,” dijo Topher Spiro, vicepresidente del grupo para la política de salud. “Este es el momento de dar rienda suelta a la competencia del mercado, y dejar que varias empresas comercialicen el medicamento”.