Ética
Hablamos de control regulatorio cuando las industrias que una agencia publica debe regular pasan a controlar a la agencia reguladora (https://www.policyed.org/intellections/danger-regulatory-capture/video). Es decir se invieerten los roles, la función de la agencia es conseguir un beneficio para los intereses de las empresas que debería regular más que proteger a los ciudadanos.
Un ejemplo de que las empresas farmacéuticas controlan la FDA es la estrecha colaboración inapropiada y sin precedentes entre la FDA y Biogen en el caso de la solicitud de comercialización del fármaco biológico de la empresa, el aducanumab para tratar la enfermedad de Alzheimer.
Una colaboración tan estrecha comprometió peligrosamente la independencia y objetividad del personal senior y de los revisores clínicos de la Oficina de Neurociencia (https://www.fda.gov/about-fda/center-drug-evaluation-and-research-cder/office-neuroscience), que pertenece a la Oficina de Nuevos Medicamentos del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos (Center for Drug Evaluation and Research CDER) de la FDA, durante la revisión de la solicitud del permiso de comercialización de del biológico aducanumab de Biogen y de los datos clave de dos ensayos clínicos pivotales de fase 3 con este fármaco que eran idénticos. El director de Oficina de Neurociencia, Billy Dunn MD, supervisó al equipo de la FDA que realizó esta revisión y probablemente jugó un papel clave en la estrecha colaboración entre la FDA y Biogen.
Después de que en 2019 los dos ensayos idénticos de fase 3 con aducanumab se detuvieran a mitad de camino porque un análisis preliminar encontró que era poco probable que mostraran que el medicamento beneficiaba a los pacientes de Alzheimer, la FDA y Biogen trabajaron en colaboración para rescatar al medicamento. Ambos utilizaron análisis dudosos que exageraron los resultados de un ensayo de fase 3 y sugirieron que el fármaco puede funcionar en dosis altas, pero ignoraron los datos del otro ensayo de fase 3 que no muestran ningún beneficio del fármaco, en ninguna dosis. La FDA y Biogen fueron coautores de un documento informativo sin precedentes sobre aducanumab que estaba muy sesgado a favor del fármaco [1].
Un estadístico solitario de la FDA, que evidentemente no participó en la estrecha colaboración entre la FDA y Biogen, fue el autor de una crítica mordaz de los análisis sesgados realizados en colaboración entre la agencia y la empresa [2]. Concluyó que no había pruebas suficientes de que el aducanumab fuera eficaz.
A principios de noviembre, los miembros de un comité asesor de la FDA se reunieron para considerar si había suficiente evidencia sobre la efectividad de aducanumab y criticaron duramente los análisis de los datos de los ensayos clínicos realizados por los revisores clínicos de la FDA y Biogen, la colaboración en la revisión y el sesgo en el documento informativo que elaboraron conjuntamente [3]. Diez de los 11 miembros del comité concluyeron que no había suficiente evidencia de efectividad para respaldar la aprobación del medicamento. Parece que, si no hubiera intervenido el comité, la FDA estaba dispuesta a lanzar al mercado un medicamento sin que hubiera evidencia sustancial de su efectividad en el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer.
El 9 de diciembre, Public Citizen’s Health Research Group envió una carta a la Oficina del Inspector General del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE UU exigiendo una investigación sobre la estrecha colaboración entre la FDA y Biogen [4]. En nuestra carta, destacamos que si la FDA decidiera aprobar el aducanumab habría varias consecuencias adversas de amplio alcance. En primer lugar, aprobar un medicamento para la enfermedad de Alzheimer que no ha demostrado ser eficaz, y que podría resultar ser ineficaz, suponiendo que se lleve a cabo y se concluya otro ensayo de fase 3 de forma adecuada, proporcionaría falsas esperanzas a millones de pacientes desesperados por la enfermedad y a sus familias.
En segundo lugar, como el medicamento sería exorbitantemente caro (la terapia tendría un precio anual de alrededor de US$50.000 [5] y eso no incluye el costo de las imágenes cerebrales en serie, como la resonancia magnética, a las que los pacientes tendrían que someterse, y podría ser utilizado por millones de pacientes durante años, tendría un impacto muy significativo en el gasto de la atención médica y podría llevar a la quiebra al programa Medicare, así como a muchos pacientes y a sus familias. Dichos costos solo serían justificables para un medicamento con evidencia definitiva de aportar un beneficio importante y clínicamente significativo.
Finalmente, la aprobación prematura de aducanumab podría impedir el desarrollo de otros tratamientos experimentales para la enfermedad de Alzheimer durante muchos años, pudiendo retrasar los avances en el desarrollo de medicamentos que podrían ser beneficiosos.
Como señalamos el 9 de diciembre en una carta separada al comisionado de la FDA [6], Stephen Hahn, afirmamos que las circunstancias que rodearon la colaboración de la FDA con Biogen antes y después de la presentación de la solicitud de comercialización del fármaco biológico para aducanumab son negativas para la reputación de la agencia. Para comenzar a restaurar la confianza del público en la FDA y en su revisión de aducanumab, instamos al comisionado a, entre otras cosas, asignar inmediatamente todas las revisiones adicionales y la toma de decisiones relacionadas con aducanumab al personal de la FDA que no colaboró estrechamente con Biogen y a deponer temporalmente al Dr. Dunn de su puesto como director de Oficina de Neurociencia hasta que se complete la investigación solicitada por la Oficina del Inspector General.
Las agencias reguladoras, incluyendo la FDA, deben mantener su independencia y objetividad cuando supervisan a las industrias reguladas para evitar consecuencias desastrosas. En el caso de la FDA, indudablemente, las deficiencias en la independencia y objetividad de la agencia podrían provocar la aprobación de medicamentos y dispositivos médicos que no son seguros o son ineficaces, lo que podría resultar en un daño sustancial a la salud pública, a las instituciones públicas y privadas y a las personas que pagan por el cuidado de la salud. El pueblo estadounidense se merece algo mejor de la FDA.
Nota de Salud y Fármacos: La aplastante votación del comité asesor de la FDA en contra del informe favorable de la agencia (todos en contra menos una abstención) socava aún más la reputación de una agencia que ya había sido cuestionada por la aprobación de la hidroxicloroquina y del suero de convalescientes para el tratamiento del COVID 19. En diciembre, la FDA todavía no había decidido sobre la aprobación de aducanumab y tiene hasta el 7 de marzo para tomar una decisión, pero una decisión a favor del medicamento y en contra de la recomendación de los asesores dañaría aún más la reputación de la agencia. Durante el año pasado, los funcionarios de la oficina de neurociencias recibieron varias críticas, no solo por el aducanumab, sino que también cuestionaron los datos que ocasionaron la aprobación de la esketamina (de J&J) que también incluían ensayos clínicos que habían fracasado, y por la aprobación de Vyondys 53 para la distrofia muscular de Duchenne en base a biomarcadores no concluyentes en diciembre de 2019, cuando se había rechazado en agosto de ese mismo año. Xpovio para tratar el mieloma múltiple fue aprobado en julio después de que un comité asesor votara en contra de su aprobación por problemas de seguridad. Esta actitud más laxa de la FDA contrasta con su comportamiento habitual. En un estudio de 82 ocasiones en que los funcionarios de la FDA no estuvieron de acuerdo con el dictamen del comité asesor se documentó que el 75% de las veces la FDA había utilizado criterios más restrictivos que el comité asesor (Zhang AD et al. Association Between Food and Drug Administration Advisory Committee Recommendations and Agency Actions, 2008–2015, Milkbank Quarterly 2019; 97, https://endpts.com/advocacy-group-accuses-fda-neuro-chief-billy-dunn-of-misconduct-in-controversial-biogen-review-demands-a-purge-and-federal-probe/; https://www.fiercepharma.com/marketing/fda-reputation-takes-another-hit-after-scathing-alzheimer-s-drug-adcomm).
Referencias