ADVIERTEN
Reacciones adversas e interacciones
Se establece una relación entre fármacos antihipertensivos y caídas
(Link between bp meds and falls affirmed for some)
Todd Neale
MedPage Today 24 de febrero de 2014
http://www.medpagetoday.com/Cardiology/Hypertension/44460
Según muestra un estudio observacional, los ancianos con diversas enfermedades crónicas –entre las que se incluyen la hipertensión arterial– tienen un riesgo mayor de sufrir graves lesiones por caídas al ser tratados para la hipertensión arterial.
Según Mary Tinetti y sus colegas de la Universidad de Yale, durante los 3 años que duró el estudio, hasta un 9% de las personas con 80 años de edad media, sufrieron una lesión grave por caída, incluyendo fractura de cadera y otras fracturas óseas graves, lesiones cráneo-encefálicas y luxaciones.
El riesgo estuvo incrementado en aquellas personas que tomaban antihipertensivos tanto de intensidad moderada (HR 1,40, 95% CI 1,03-1,90) como de alta intensidad (HR 1,28, 95% CI 0,91-1,80) en comparación con el grupo que no tomaba ningún antihipertensivo.
El mayor riesgo lo tenían aquellos que ya habían sufrido una lesión grave por caída en el año previo (HRs 2,17 y 2,31, respectivamente), según se publicó en la versión electrónica de JAMA Internal Medicine.
Estos hallazgos son coherentes con trabajos previos que estudiaban la relación entre antihipertensivos y caídas en personas de edad avanzada y que guarda sintonía con las preocupaciones debatidas en el año 2011 en el documento de consenso sobre el manejo de la hipertensión arterial en personas de edad avanzada que publicaron la American College of Cardiology y la American Heart Association.
Adam Skolnick, médico del NYU Langone Medical Center, ha cuestionado, sin embargo, algunos aspectos del estudio, como el que no se hayan encontrado diferencias en el riesgo de lesiones graves por caídas dependiendo de la familia farmacológica del antihipertensivo, ni que se haya evidenciado un gradiente de dosis-respuesta entre la intensidad del tratamiento y el riesgo de de caídas. Hay estudios previos –comenta- que muestra que los diuréticos concretamente se asocian con caídas, “lo cual tiene todo el sentido, puesto que pensando en alguien que está deshidratado y que por tanto tiene una pre-carga reducida, es evidente que será vulnerable a mareos y caídas”.
Lo que Skolnick saca en claro de la ausencia de diferencias por familia farmacológica es “que es difícil que me crea la validez de estos resultados”, según declaró en una entrevista.
Sí que otorgó más credibilidad al hallazgo de que los pacientes que ya habían sufrido una caída previa en el año anterior estuvieran en riesgo incrementado de volverla a sufrir.
“Por lo tanto cuando se exploran los antecedentes y se va a prescribir un medicamento que en teoría incrementa el riesgo de caídas, creo que es muy importante explorar los antecedentes de caídas y en estos casos, llevar especial precaución con la prescripción de fármacos que pudieran incrementar aún más este riesgo”.
En el editorial que acompaña a la publicación del estudio, Sarah Berry y Douglas Kiel, médicos del Hebrew SeniorLife en Boston, debaten acerca de cómo deben hacer los clínicos el balance beneficio-riesgo cuando valoren la prescripción de antihipertensivos en personas de edad avanzada.
“Cuando no haya datos directos, se debe individualizar la decisión de instaurar un tratamiento antihipertensivo ponderando el estado funcional, la esperanza de vida y las preferencias asistenciales”, escriben.
“Puede que haya pacientes para los que el miedo a caerse sea primordial, y puede que otros sin embargo tengan más temor a las posibles complicaciones que pudieran surgir de una tensión arterial elevada y no tratada”, escriben. “Desafortunadamente no es fácil la ponderación clínica de estos factores, por lo que se recomienda un debate amplio con cada paciente”.
“Cuando haya clara indicación de antihipertensivos, usar la mínima dosis posible para un umbral de tensión arterial dado, puede ser una recomendación acertada”, y añaden, “los clínicos tienen que prestar más atención al riesgo de caídas en ancianos con hipertensión arterial con el fin de prevenir lesiones graves por caídas, sobre todo en aquellas personas que ya hayan sufrido alguna”.
El estudio estuvo financiado por el National Institute on Aging.
Tinetti declaró no tener ninguna relación relevante con la industria. Una de sus co-autoras declaró tener relaciones relevantes con Medtronic, 21st Century Oncology, y con Fair Health. Berry declaró tener relaciones relevantes con UpToDate. Kiel declaró tener relaciones relevantes con Amgen, Lilly, Merck, Ammonett Pharma y UpToDate.