Ética
Conducta de la Industria
EE UU. La industria farmacéutica gastó millones para acallar las quejas sobre los altos precios de los medicamentos
(Drug industry spent millions to squelch talk about high drug prices)
The Washington Post, 19 de diciembre de 2017
https://www.washingtonpost.com/national/health-science/drug-industry-spent-millions-to-squelch-talk-about-high-drug-prices/2017/12/19/8b86f66a-e4a5-11e7-927a-e72eac1e73b6_story.html
Traducido por Salud y Fármacos
Nuevos documentos muestran que el mayor grupo comercial de la industria farmacéutica, el año pasado, frente a la hostilidad bipartidista por los altos precios de los medicamentos en un año electoral, incrementó sus ingresos en casi una cuarta parte y distribuyó los millones recaudados entre cientos de cabilderos, políticos y grupos de pacientes.
Fue el aumento más grande para PhRMA, la cámara de las grandes empresas farmacéuticas innovadoras, desde que el grupo tomó el liderazgo para avanzar sus intereses en 2009 antes de que se aprobara la Ley de Servicios de Salud Asequibles (ACA u Obamacare).
“¿Eso te sorprende?”, dijo Billy Tauzin, el ex CEO de PhRMA quién dirigía la organización hace una década cuando se empezó a hablar de Obamacare. Cada vez que Washington parece estar interesada en controlar los precios de los medicamentos, dijo, “PhRMA siempre responde aumentando sus recursos”.
El grupo, que ya es una de las cámaras más poderosas de cualquier industria, en 2016 recaudó US$271 millones en cuotas de miembros y otros ingresos. Eso fue más que los US$220 millones del año anterior, según la última información entregada al Servicio de Impuestos Internos.
El año pasado (2016) PhRMA gastó US$7 millones para preparar su omnipresente campaña publicitaria “Se Valiente” o “Go Boldly” y dio millones a los políticos de ambos partidos que se presentaban a las elecciones en docenas de estados. Se prodigaron más de US$2 millones entre muchos grupos que representan a pacientes con diversas enfermedades, muchos de los cuales enfrentan los altos costos de los medicamentos.
Algunos de los cheques más grandes para las asociaciones de pacientes fueron para la Asociación Americana de Enfermedades Relacionadas con Enfermedades Autoinmunes, por US$260.000; la American Lung Association, por US$110.000; la Fundación de Investigación de la Diabetes Juvenil, por US$136.150; y la Fundación Lupus de América, por US$253.500.
PhRMA también dio mucho dinero a los grupos políticos nacionales que financiaban a candidatos para el congreso federal, al presidente y a los gobiernos estatales. La American Action Network, de tendencia conservadora, recibió US$6,1 millones. La Asociación de Gobernadores Republicanos obtuvo US$301.375. Su homólogo demócrata recibió US$350.000.
El gasto de PhRMA en cabildeo estatal y federal aumentó en más de dos tercios respecto del año anterior, a US$57 millones.
“Eso es PhRMA. Lo hacen todo” para proteger a las compañías farmacéuticas de posibles riesgos políticos, dijo Sheila Krumholz, directora ejecutiva del Centro para Políticas Receptivas (Center for Responsive Politics), que monitorea el financiamiento político. “Y van a reunir aún más recursos cuando perciban que estas amenazas u oportunidades son más inminentes”.
Las amenazas parecían especialmente graves el año pasado. Avalanchas de mala publicidad golpean a la industria en forma de historias sobre ejecutivos arrogantes y píldoras de mil dólares.
La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton dijo que algunas compañías farmacéuticas estaban “haciendo una fortuna con la desgracia de la gente”. El entonces candidato Donald Trump sugirió que podría ahorrar 300.000 millones de dólares anuales exigiendo a los fabricantes de medicamentos que compitan en licitaciones.
Las organizaciones sin fines de lucro como PhRMA deben presentar informes detallados a la oficina federal de impuestos (IRS). PhRMA, que presentó su informe de 2016 a principios de noviembre, compartió una copia con Kaiser Health News.
La cámara también invirtió dólares en los estados donde los legisladores estaban considerando medidas relacionadas con los medicamentos, tales como controlar los precios o mayor transparencia de precios, según el documento.
Dio US$64 millones a un fondo de California creado para derrotar una propuesta que hubiera establecido que las agencias estatales no pagaran más por los medicamentos que el Departamento Federal de Asuntos de Veteranos. Con el apoyo y las contribuciones directas de las compañías farmacéuticas, el año pasado el fondo gastó US$110 millones para derrotar la iniciativa, según muestran los documentos regulatorios de California.
Este año, California estableció una ley menos comprehensiva que exige que las empresas farmacéuticas notifiquen y expliquen cuándo van a aumentar sustancialmente los precios. PhRMA recientemente llevó a juicio al estado para bloquear esa medida.
El año pasado en Louisiana, donde los legisladores estaban considerando propuestas para que los consumidores tuvieran más información sobre los precios de los medicamentos, PhRMA contribuyó directamente a las campañas de decenas de legisladores estatales. El grupo también otorgó cientos de miles de dólares para ayudar a derrotar la propuesta de que los residentes de Colorado pudieran votar por un sistema de salud con un financiador único.
La movilización masiva del año pasado pone de relieve cuán sitiada estaba la industria por las quejas sobre el alza de los precios de los medicamentos y las altas ganancias.
Los US$271 millones que ingresó PhRMA representaron su mayor presupuesto desde 2009, cuando recibió US$350 millones en concepto de cuotas y otros ingresos.
Los US$57 millones que gastó en cabildeo también fueron los más efectivos desde 2009, cuando el gasto por cabildeo fue de US$70 millones. Lo mismo sucedió con los US$7 millones invertidos en publicidad, un costo que debería aumentar este año, ya que los anuncios “Go Boldly” se emitieron en 2017. PhRMA empleó a 237 personas el año pasado, frente a menos de 200 en 2011.
Los 37 miembros de PhARMA incluyen las compañías farmacéuticas más grandes y más conocidas, incluyendo Johnson & Johnson, Celgene, Merck, Pfizer, Eli Lilly y Amgen. Holly Campbell, una portavoz de PhRMA, se negó a permitir que un ejecutivo discutiera el informe, diciendo que no hace comentarios sobre las contribuciones.
“PhRMA se relaciona con las partes interesadas de todo el sistema de atención médica para escuchar sus perspectivas y prioridades”, dijo en un correo electrónico. “Trabajamos con muchas organizaciones con las que tenemos acuerdos y desacuerdos sobre cuestiones de política pública”.
Los grupos de pacientes que reciben dinero de PhRMA a menudo niegan que influya en sus políticas o les impida criticar los altos precios de los medicamentos.
La Fundación Lupus tiene políticas para garantizar que no haya conflicto de intereses, dijo una portavoz. En la Fundación para la Investigación de la Diabetes Juvenil, donantes como PhRMA “no tienen ningún papel” en el proceso de toma de decisiones del grupo, dijo una portavoz.
“Ningún financiador influye en nuestra posición, agenda o mensajes científicos” en la American Lung Association, dijo su portavoz.
La Asociación Americana de Enfermedades Autoinmunes y Relacionadas no respondió a las solicitudes de comentarios.
Durante las negociaciones sobre Obamacare, PhRMA acordó relativamente pronto apoyar las mejoras al sistema de salud, a mediados de 2009. Luego se dedicó a promover la medida que prometía miles de millones en nuevos ingresos para los miembros. El presidente Barack Obama promulgó la ley en marzo de 2010.
PhRMA se redujo sustancialmente después de eso, captando alrededor de US$205 millones durante varios años seguidos a partir de 2010.
El año pasado acordó aumentar las cuotas en un 50% para recaudar US$100 millones adicionales, informó Politico. En un intento por distanciarse de las compañías farmacéuticas que obtienen malos titulares, también decidió echar a los miembros que no invirtieran un mínimo en investigación farmacéutica.