Resumen
Los medicamentos contra el cáncer han llegado a ser una de las tecnologías médicas que más dominan en el mundo. Generan enormes beneficios para la industria biofarmacéutica, y además estimulan las actividades de investigación y de cabildeo de los financiadores públicos, organizaciones de pacientes, comunidades clínicas y científicas y los ecosistemas políticos federales. El desajuste entre el precio, la asequibilidad y el valor de muchos medicamentos oncológicos y las necesidades mundiales ha generado un importante debate político y, sin embargo, apenas se observan cambios en el comportamiento de los principales actores, desde las entidades públicas que financian la investigación hasta las autoridades reguladoras. En este análisis político discutimos si, teniendo en cuenta el dinero y el poder inherentes a este sistema, se puede alcanzar algún tipo de consenso y política mundial razonables para ofrecer medicamentos contra el cáncer asequibles y equitativos que proporcionen sistemáticamente beneficios clínicamente significativos.