Farmacovigilancia
Reacciones Adversas e Interacciones
Benzodiazepinas: neumonía
Revue Prescrire 2017; 37(405):507
Traducido por Salud y Fármacos
Un estudio de cohortes publicado a comienzos de 2017 ha explorado la relación entre las benzodiazepinas y la neumonía. La cohorte reunió datos procedentes de unos 50.000 pacientes con Alzheimer, dada la alta frecuencia del uso de benzodiazepinas y de neumonía en esta tipología de pacientes. La inscripción de sujetos se realizó a partir de la base de datos del seguro sanitario de Finlandia. 8.501 sujetos tomaban una benzodiazepina o un hipnótico similar y se compararon con pacientes que no tomaban ninguno de estos fármacos [1].
Durante el periodo de exposición a benzodiazepinas o hipnóticos similares, la incidencia media anual de neumonía fue 8%. El uso de benzodiazepinas o fármacos similares se asoció con un aumento del riesgo de neumonía, con un riesgo relativo (RR) estimado de 1,2 (IC 95%: 1,05-1,4). El riesgo fue particularmente marcado durante los 30 primeros días de exposición [1].
Este estudio respalda hallazgos previos que sugerían un aumento de casos de neumonía, otras complicaciones respiratorias infecciosas, e incluso un aumento de la mortalidad tras un cuadro gripal en pacientes tratados con benzodiazepinas o fármacos relacionados, independientemente de la edad [2,3].
Se han sugerido muchos mecanismos de acción. Las benzodiazepinas producen problemas de deglución y el consiguiente riesgo de aspiración. También producen sedación, supresión del reflejo tusígeno y depresión respiratoria, todos los cuales pueden exacerbar un trastorno pulmonar. Se ha sugerido un hipotético efecto inmunosupresor de las benzodiazepinas, pero no se han hallado evidencias que lo apoyen [1,2,3].
En la práctica. Las benzodiazepinas y los hipnóticos relacionados predisponen a padecer una neumonía. Esto debería tenerse en cuenta a la hora de considerar el inicio del tratamiento con estos fármacos, particularmente en pacientes que ya presentan riesgo de neumonía.
Referencias