Resumen
Contexto La bacteriuria asintomática (BA) es frecuente entre los residentes de centros para el cuidado de ancianos (CCA). Sin embargo, en los adultos mayores es difícil diferenciar entre una infección urinaria establecida y la BA. Por eso es frecuente que en estos centros residenciales se haga un uso excesivo de tiras reactivas para hacer análisis de orina, y se inicie el tratamiento con antibióticos.
Objetivo Encontrar, evaluar y sintetizar estudios que informen sobre la efectividad, los daños y los eventos adversos asociados con el tratamiento con antibióticos de los pacientes mayores con BA que residen en centros residenciales.
Diseño y entorno Una revisión sistemática utilizando los métodos estándar de Cochrane para evaluar la evolución de los residentes en centros para personas mayores con BA que usan antibióticos, placebo o ningún tratamiento.
Método Se realizaron búsquedas en tres bases de datos electrónicas (PubMed, EMBASE y CENTRAL), registros de ensayos clínicos y verificaciones de las referencias de los estudios incluidos.
Resultados Se incluyeron nueve ensayos controlados aleatorios, con 1.391 participantes; dos de ellos usaron como comparador un placebo, y los siete restantes usaron como control a grupos sin terapia. Hubo un número relativamente pequeño de estudios que evaluaron los resultados y un riesgo general moderado de sesgo. Los resultados relacionados con la mortalidad, la evolución de la BA y las complicaciones fueron comparables entre los dos grupos. La terapia con antibióticos se asoció con una mayor cantidad de eventos adversos (cuatro estudios; 303 participantes; riesgo relativo [RR] 5,62, intervalo de confianza [IC] del 95 % = 1,07 a 29,55, P = 0,04) y curación bacteriológica (nueve estudios; 888 participantes RR 1,89, IC del 95 % = 1,08 a 3,32, P = 0,03).
Conclusión En general, aunque el tratamiento con antibióticos se asoció con la curación bacteriológica, también se asoció con un número significativamente mayor de eventos adversos. Los daños y la falta de beneficio clínico del uso de antibióticos en pacientes mayores que viven en residencias de ancianos pueden superar los beneficios.